KINGSTON FISHER
Billie Lourd, la hija de Carrie Fisher, se convirtió en madre de su primer hijo hace un año, al que nombró en homenaje a su madre. Ahora la actriz se ha sincerado sobre su infancia y cómo eso le ha ayudado en la crianza del pequeño Kingston.
La actriz Carrie Fisherfalleció trágicamente en diciembre de 2016 con 60 años, y la pérdida fue devastadora para su hija Billie Lourd, que además perdió a su abuela Debbie Reynolds al día siguiente.
Ahora la actriz de 'Scream Queens' está en un gran momento personal, y su hijo Kingston Fisher con Austen Rydell acaba de cumplir un añito.
Billie se ha sincerado sobre la "presión" que sufría de pequeña para ser la que cuidaba de su madre, algo que le enseñó "qué no hacer" para criar a su hijo.
"Mi trabajo principal cuando estaba viva era cuidar de ella y asegurarme de que estaba bien. Era su principal apoyo, y tenía 7 años, y eso fue muy duro y por eso crecí muy rápido porque era su mejor amiga. Era su madre, era su hija, era su todo. Y esa es una de las cosas que he aprendido a no hacer con mi hijo", confiesa.
"Hay muchas cosas que mi madre me enseñó y luego hay mucho que, sinceramente puede que sea más valioso, lo que me enseñó a no hacer. Y es una de las cosas que no le haré a mi hijo, ponerle esa presión que yo tuve", asegura.
No obstante, Billie siempre tiene presente a su madre y la recuerda con cariño en días señalados como su cumpleaños o el aniversario de su muerte. La actriz de 29 años le ha dedicado homenajes como cantar su canción favorita o realizar el viaje que siempre soñópara ir a ver la Aurora Boreal.