CONSEJO
El calor, el sudor y el roce pueden provocar que aparezcan distintas ampollas o rozaduras. Te contamos diferentes trucos para poder evitarlas y disfrutar del verano.
Con la llegada del verano y del calor, en ocasiones tenemos que comprar nuevos zapatos. El sudor, las altas temperaturas y la fricción producida pueden derivar y generar ciertas ampollas o rozaduras en nuestros pies hasta que el calzado se amolde. Para poder evitar esta circunstancia te daremos algunos trucos y consejos que puedes utilizar para no tener estos dolores y disfrutar sin esta preocupación.
En primer lugar, podemos utilizar crema hidratante, para ello debemos echar un poco sobre nuestros talones o diferentes áreas que puedan entrar en contacto o roce con los zapatos, de esta manera tendrás hidratadas y protegidas estas zonas, pudiendo evitar la aparición de heridas debido a la fricción. Otros elementos que podemos utilizar y hacen el mismo efecto son: la vaselina, el aceite de coco o aloe vera.
Podemos también aplicar crema sobre los zapatos (si son de piel), sobre determinadas áreas que pueden entra en contacto y sobre todo por los bordes y costuras. Esto hará que se ablande y evitemos molestias. Otros trucos son el uso del secador sobre el zapato para poder moldearlos, el uso de ciertas bolas de papel para poder agrandarlos si te quedan pequeños o el uso de hormas para darles de sí para evitar el dolor.
Otra causa por las que surgen rozaduras es el sudor. Para poder evitarlo podemos utilizar polvos de talco sobre nuestros pies para evitar una sudoración excesiva. Además, es muy importante que sequemos correctamente esta parte de nuestro cuerpo, especialmente entre los dedos, tras la ducha para evitar que surjan diferente hongos y humedad.
Por último, es recomendable el uso de calcetines o pinkies para que los pies no sufran.