Niños y pandemia
El coronavirus es un virus que nos ha pillado a todos de nuevas. Lo veíamos muy lejos cuando comenzó en China, pero finalmente ha llegado a España de manera estrepitosa. Es normal que estemos asustados, ya que está afectando a muchas personas.
Pero, ¿qué hay de los niños? ¿Cómo les afecta? ¿Qué debemos hacer?
A diferencia de lo que ocurre en otras epidemias virales que sufrimos habitualmente, el coronavirus, con los datos disponibles actualmente, no parece ser un virus que afecte especialmente a los niños, de hecho, son el grupo de edad menos afectado. Además, por suerte, pocos niños enferman de gravedad y suelen ser niños con enfermedades de base. ¿Por qué ocurre esto? Hay diferentes teorías, pero a ciencia cierta no lo sabemos.
¿Qué le puedes notar a tu hijo si tuviese un coronavirus?
Pues, por suerte o por desgracia, es bastante indistinguible de cualquier otro cuadro viral. Tos, mucosidad, dolor de garganta, dolor muscular o de articulaciones o fiebre más o menos alta. En ocasiones también asocian vómitos o diarrea. Como ves, algo bastante habitual en casi cualquier niño en esta época del año si tenemos en cuenta que, en ocasiones es sólo tos y mocos.
Entonces, ¿qué hacemos si nuestro hijo tiene un cuadro catarral en estos días?
Lo primero de todo no alarmarte. Recuerda que en los niños suele ser un cuadro leve si no tienen ninguna enfermedad de base y en unos días suelen mejorar. Como en cualquier cuadro catarral, le haremos lavados nasales si tiene mucosidad, cambiaremos un poco la postura por la noche para intentar mejorar la tos incorporándole la cabecera de la cama, paracetamol si tiene fiebre o malestar, alimentación según tolere y líquidos abundantes si tiene vómitos a diarrea. Tratamientos que seguro conoces de otros virus que haya sufrido tu hijo.
¿Qué es, quizás, lo más importante de todo que debes saber?
Que si tu hijo tiene cualquier cuadro que cumpla con estas premisas debemos actuar con mucha, mucha prudencia y actuar como si fuese un caso posible. ¿Un catarro sin fiebre también? Sí, en un catarro sin fiebre también. ¿Por qué? Porque ellos lo van a pasar, en su gran, gran mayoría, sin problemas. Pero pueden contagiar a los mayores, que son los que debemos llevar precaución y si hay abuelos cercanos, más precaución.
Tranquilidad ante todo, recuerda que casi todos van a tener clínica leve. Ya sabes que hay que evitar acudir a centros sanitarios a no ser que veas algo importante por lo que creas que tu hijo necesita valoración presencial por un pediatra, como dificultad para respirar o lo veas con mal estado. Todo lo que puedas resolver telefónicamente con vuestro pediatra del centro de salud será lo mejor para esta epidemia. Son días de mucha saturación telefónica, así que debes tener paciencia.
Y lo más importante de todo, seguir las medidas de aislamiento de casos leves recomendadas por el Ministerio de Sanidad de la manera más estricta posible. Léelas detenidamente y aquí sí que todos los convivientes debéis evitar al máximo salir a la calle en los siguientes días. El niño como caso sospechoso y vosotros como contactos, debéis guardar la cuarentena estrictamente.
Si en casa ninguno estáis enfermos, pero aún tienes dudas de cómo prevenir el contagio por el coronavirus, aquí te recordamos las claves:
- Ya desde hace días deberías estar sin salir de casa. Es duro para todos, para los niños incluso más que para nosotros. Pero tenemos que intentar mantener el confinamiento, es la única manera de parar la propagación del virus. No salir de casa ni para hacer la compra si puedes, tienes miles de alternativas online para hacerla y mantener el distanciamiento de otras personas. ¿Es el cumpleaños de algún familiar? Entendemos que os gustaría celebrarlo juntos aunque fuese en casa, pero ya habrá tiempo de celebraciones, ahora es momento de cumplir el aislamiento y ésa será la mejor forma de demostrar nuestro cariño por nuestra familia.
- Si tienes que salir a algo imprescindible, mantén la distancia de unos 2 metros con otras personas.
- Lavado de manos, lavado de manos intensivo para todo. El gel desinfectante puede ser de utilidad, pero no te obsesiones y salgas como loca a comprarlo. El agua y jabón es mucho más barato, más fácil de conseguir e igual de efectivo.
- Evita el contacto con personas enfermas.
- Evita pedir ayuda a los abuelos para la imposible conciliación familiar en determinadas profesiones.
No nos queda más que animarte. Cada día que pasa es un día menos de este confinamiento y esta situación tan desagradable y anómala para todos. ¡Ánimo!