Los huevos son un alimento básico en cualquier lista de la compra. Se pueden cocinar de mil maneras y encajan a la perfección en muchas recetas. Ya sean huevos duros para la ensalada, huevos escalfados en la sopa, huevos fritos con patatas, tortilla francesa o con patatas, son incontables las maneras de añadir este delicioso ingrediente a nuestra dieta.
Gracias a todos sus nutrientes, los huevos son un producto ideal para consumir a primera hora de la mañana. Se cuentan por miles las personas que empiezan el día desayunando huevos revueltos, ya que además de ser una gran fuente de proteínas, proporciona la energía suficiente para enfrentarnos a las responsabilidades más exigentes. No obstante, el proceso de elaboración no es tan sencillo, razón por la que en el vídeo te enseñamos cómo cocinarlos correctamente.
¿Cómo se deberían cocinar los huevos revueltos?
- Batir los huevos antes es importante. A la hora de hacer los huevos revueltos, mucha gente calienta la sartén, pone un poco de aceite para que no se pegue, casca los huevos y los vierte directamente sobre el recipiente. Sin embargo, es un error. Para que queden perfectos es importante batirlos antes con una varilla de cocina a ser posible. Las burbujas que saldrán son señal de que ha entrado aire y, por lo tanto, el resultado será mucho más esponjoso.
- Espera a que estén cocinados para añadir la sal. Otro error muy común es poner la sal cuando los huevos están batidos, pero es recomendable añadirla cuando ya están servidos en el plato porque de lo contrario puede endurecerlos.
- No añadas leche, agua o cualquier otro ingrediente. También es frecuente añadir agua o leche para conseguir que los huevos revueltos queden mucho más jugosos. No obstante, es un paso que debemos omitir, ya que la jugosidad tiene más que ver con el tiempo cocción y con la temperatura a la que se prepara esta receta.
- Usar una sartén antiadherente. Las sartenes con propiedades antiadherentes resultan ideales para que la comida no se quede pegada. Además de ello, otra de las ventajas es que no se requiere mucho aceite para cocinar, algo que podría afectar a la textura final.
- A fuego lento y ten paciencia. Después de tener en cuenta todos los consejos anteriores, el paso final para conseguir los huevos revueltos perfectos está en cocinarlos a temperatura muy baja y tener paciencia durante el proceso. A pesar de que se tarda algo más en hacerlos, es la única forma de evitar que el huevo se cuaje y quede seco.
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