Riesgos
Estas son las nuevas reglas para ir a la piscina este verano con el coronavirus en mente.
Con la apertura de las piscinas públicas es posible que hayan empezado a entrarte dudas e incluso pánicos. Este no será un verano normal, y conviene tenerlo todo atado y aprendido para evitar contagios y también, agobios. Esto es lo que debes saber antes de darte el primer chapuzón de la temporada.
Lo primero, una buena noticia: los expertos en salud aseguran que no hay evidencia de que la COVID-19 pueda transmitirse mediante el uso de aguas recreativas. Esto es, ríos, mares y también piscinas públicas y parques acuáticos cuyas instalaciones hayan sido debidamente tratadas con químicos.
Se sabe que el cloro y otros desinfectantes comunes como el bromo, el ozono o los UV desarman los microorganismos del virus en tan solo 30 minutos. Y de la misma manera no parece probable que nadar en un río, lago u océano tenga algún riesgo para nuestra salud. Según los expertos, los virus que infectan a los humanos generalmente sobreviven poco en agua dulce y nada en agua salada.
Sin embargo, la actividad dentro y alrededor del agua sí puede representar un riesgo para la salud durante la pandemia. Y estas son las reglas básicas que debemos tener en cuenta a la hora de evitar una posible propagación del virus:
1. Mantener el distanciamiento social dentro y fuera del agua
El cloro solo nos protege hasta cierto punto dentro de una piscina pública. Los profesionales de la salud recomiendan mantener la distancia de seguridad interpersonal, también dentro del agua.
2. Usa mascarilla alrededor de la piscina
Esto nos va a costar más con el calor, pero tendremos que acostumbrarnos a llevar la mascarilla fuera del agua este verano, y asumir que la mitad de nuestra cara no se nos va a poner morena. No obstante, cada instalación nos indicará cómo y cuándo usarla.
3. Ten especial cuidado en las zonas comunes
La gran amenaza para los visitantes de las piscinas públicas estos meses son, sin lugar a dudas, las áreas comunes. Cualquier lugar de máximo contacto como una mesa de la zona de picnic, una taquilla, un pasamanos, las sillas y los baños públicos deberían ser evitados o tratados con especial cuidado, ya que ha quedado demostrado que el coronavirus puede vivir en las superficies (aunque es más difícil que nos contagiemos al tocar una superficie contaminada, según la Organización Mundial de la Salud).
Muchas piscinas públicas, como las de los hoteles y los parques acuáticos, están adoptando nuevos protocolos de limpieza para abordar el problema de las superficies comunes. Nos encontraremos con nuevas normas que si bien serán incómodas, tiene la importante función de protegernos contra el virus y evitar su propagación.
Se ultima cada detalle y se evalúan todos los riesgos para asegurar la máxima seguridad. En hoteles, por ejemplo, veremos que se limpian y se desinfectan las superficies al menos dos veces al día, prestando especial atención a los manillares de las puertas, las escaleras, las duchas, los vestuarios y las tumbonas. No obstante, incluso cuando las medidas de higienización por parte de los establecimientos sean las adecuadas, no estará de más tomar precauciones adicionales como lavarse las manos, el trending topic de esta pandemia.