CONSEJOS
Existen ciertos artículos domésticos que no se cambian con la frecuencia que deberían, pero este es el período de tiempo recomendado.
No importa cuántas veces a la semana dediquemos a la limpieza del hogar, existen ciertos artículos que son un hervidero de gérmenes y bacterias. Según sugiere un estudio realizado en Estados Unidos, hay alrededor de 9.000 especies diferentes de microbios viviendo en nuestra casa, y áreas susceptibles a la aparición de humedad como por ejemplo el cuarto de baño o la cocina, pueden estar llenas de elementos que deberíamos reemplazar con mayor frecuencia.
Todos sabemos que hay algunos artículos domésticos que deben cambiarse por uno nuevo cuando empiezan a verse maltratados, como es el caso de los cepillos de dientes. Sin embargo, incluso compras de gran valor como muebles o electrodomésticos también tienen una vida útil limitada. En el vídeo hacemos un repaso a algunos de los elementos más usados en nuestro día a día y que no se sustituyen con la frecuencia que deberían.
¿Con qué frecuencia hay que sustituir estos artículos domésticos?
Las esponjas para fregar los platos son, probablemente, uno de los artículos del hogar con más gérmenes. Están en constante contacto con todo tipo de alimentos y restos, por lo que la frecuencia con la que debería cambiarse según las pautas recomendadas es de una vez al mes. No obstante, en líneas generales esperamos a que el estropajo empiece a verse maltratado antes de reemplazarla por una nueva.
Las esponjas no son el único ejemplo de cosas que tenemos por casa y que no sustituimos con la periodicidad recomendada. A pesar de que las lavemos con regularidad, las toallas deberían cambiarse cada dos años porque pasado este tiempo pierden gran parte de sus poderes absorbentes. Por otro lado, las sartenes tienen una vida útil de cinco años o menos, ya que hay que retirarlas cuando sus propiedades han dejado de funcionar.
Otro artículo que deberíamos cambiar con mayor frecuencia es la escobilla del WC. Se trata de un artículo que utilizamos popularmente para limpiar el interior del inodoro, razón por la que debería relevarse por una nueva cada seis o doce meses. Finalmente, y entre los artículos más costosos de la lista, está el sofá. El tiempo puede variar según el cuidado que le hayamos dedicado, pero de acuerdo al uso continuado debería cambiarse cada siete o quince años.
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