DULCES Y SALADOS
Además de buscar la calefacción para evitar pasar frío, cierto tipo de alimentos pueden ser de ayuda durante los meses más fríos del año. Existen diferentes alimentos, tanto dulces como salados, que conservarán el calor de forma óptima.
Con el frío del invierno, no solo hay que abrigarse por fuera, también es importante lo que comemos. En estos meses, dejan de apetecer ensaladas y preferimos un caldo o una sopa para entrar en calor. Hay otros alimentos que también ayudan a protegernos del frío y que podemos incluir en nuestra dieta.
Uno de ellos es el chocolate negro, ya que es rico en nutrientes y aumenta las defensas del sistema inmunológico. Con una onza de chocolate negro puro ya estaremos aportando estos beneficios al cuerpo. Otra forma de producir más calor corporal es tomar un puñado de frutos secos. Dado su alto contenido calórico con grasas saludables, nuestro cuerpo tendrá más recursos que quemar para aumentar la temperatura.
Las legumbres son también una opción apropiada, y no solo porque las tomemos a través de potajes y guisos calientes. Tienen una gran cantidad de proteínas, que ayudarán al cuerpo a regularse y mantenernos con energía.
La canela se adapta a muchos platos, y es perfecta para prevenir resfriados y reducir el entumecimiento muscular. El ajo y la cebolla tienen propiedades similares, y son la base del sofrito que incluimos en tantos platos. Incluir todos estos alimentos en nuestra dieta hará que el cuerpo se regule mejor ante las bajas temperaturas.