CONSEJO
El consejo de toda la vida es que hay que lavarse los dientes después de cada comida. Sin embargo, es un error hacerlo inmediatamente después de comer. Te contamos por qué.
La recomendación general de los odontólogos es cepillarnos los dientes al menos tres veces al día, lo ideal es hacerlo tras las tres comidas principales, desayuno, comida y cena. No obstante, a pesar de efectivamente deberíamos lavarnos los dientes tras ingerir alimentos para evitar posibles infecciones y bacterias, lo cierto es que no deberíamos hacerlo inmediatamente después de comer.
Por qué no deberíamos lavarnos los dientes justo después de comer
La razón principal para evitar este gesto tras comer, es que algunos alimentos cambian el pH de nuestra saliva, hacen que este se vuelva más ácido y esto puede ser perjudicial para el esmalte de nuestros dientes, ya que pueden debilitarlo.
La saliva regulará nuevamente el pH de la boca, pero tarda un rato en volver a equilibrarlo. Este proceso suele tardar alrededor de media hora. Pasado ese tiempo podrás cepillarte los dientes sin ningún problema.
Sin embargo, si estamos muy incómodos y no podemos esperar podemos tratar de enjuagarnos la boca con agua o consumir algún chicle sin azúcar. Eso sí, es recomendable que los chicles contenga Xilitol, ya que es un ingrediente que ayuda a prevenir la caries. Además, al masticar el chicle el flujo de saliva se incrementará por lo que acelerará el proceso de restaurar el pH tras comer.
Si no puedes esperar esta media hora de rigor para lavarte los dientes por tener que salir de casa, siempre será más recomendable lavártelos que no.
Por qué no debemos enjuagarnos la boca tras lavarnos la boca
Además, un gesto muy habitual que realizamos tras cepillarnos los dientes es inmediatamente después aclararnos la boca con agua. Sin embargo y aunque parezca una locura, es una costumbre que deberíamos dejar de realizar. La pasta de diente tiene ciertos componentes que ayuda a proteger nuestra boca de bacterias y otras dolencias, pero esto no tiene un efecto inmediato. Se necesita al menos unos 30 minutos para que actúe correctamente.
Naturalmente, no vamos a estar con la boca llena de pasta de dientes esperando media hora a que sus componentes hagan efecto. Lo ideal simplemente es eliminar ligeramente el exceso de pasta de nuestra boca, pero no realizar un aclarado profundo, para dejar que sus elementos actúen debidamente.
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