TRAJES DE BAÑO

Por qué no es bueno dejarse un bañador mojado

No caigas en la tentación de dejarte más tiempo del que debes el bikini mojado. Te explicamos por qué.

BikiniiStock

Nos solemos llevar una pieza de ropa interior o un bikini de recambio para poder disfrutar de una muda seca para dar un paseo después de una jornada en la playa o en la piscina o volver a casa sin que se nos moje la ropa.

Sin embargo, ¿cuántas veces has salido del agua y te has ido a tomar algo a un chiringuito sin cambiarte el bikini? ¿O te has enfrascado leyendo ese libro que te tiene tan enganchada sin darte cuenta de que llevas el bikini mojado? ¿Juegas a las palas, a las cartas o paseas por la playa con el traje de baño mojado?

Si eres de las que sospecha que no es del todo correcto permanecer durante horas con el bikini mojado, pero a veces haces la vista gorda, tienes que leer este artículo. En NovaMás te explicamos las consecuencias de esta práctica nada recomendada.

Braguita mojada: el caldo de cultivo de bacterias y hongos

Ya sea porque tenemos un sistema inmune más débil, padecemos alguna enfermedad como la diabetes o tomamos determinados fármacos, somos muchas las que tenemos tendencia a desarrollar hongos vaginales.

Si además pasamos más tiempo del que debiéramos con un traje de baño mojado, las probabilidades de que las bacterias proliferen en un entorno húmedo y caliente se multiplican. Cuando esto sucede se altera el equilibrio de estos gérmenes de nuestra flora vaginal, pero también puede ocurrir que una cepa agresiva externa colonice la vagina y nos provoque diferentes infecciones.

Infección por candidiasis

Las bacterias que quedan en el bañador pueden crear un crecimiento excesivo de hongos en la vagina o en la vulva, lo que puede provocar desagradables síntomas como picor intenso, ardor, irritación o la alteración del flujo vaginal -se vuelve más denso y adquiere un fuerte olor-.

¿Qué es la tiña inguinal?

Si no has oído hablar de esta infección es el momento de ponerte al día. Si tu bañador mojado entra en contacto con un tipo de hongos que se llama dermatofitos, pueden extenderse por la piel de la zona genital -en los hombres el escroto y en las mujeres la vulva- las ingles y el trasero. Su crecimiento provoca una sintomatología muy concreta: rojeces en forma de ronchas y erupciones de pequeños granos.

Aumenta el riesgo de cistitis

La biología no resulta la aliada de las mujeres en cuanto a la infección urinaria se refiere. Nuestra uretra es mucho más corta que los hombres y este es el principal motivo por el cual las bacterias llegan antes a nuestro tracto urinario. Cuando esto ocurre sentimos sensación de ardor al orinar y una necesidad constante de ir al baño, unas molestias muy incómodas que se solucionan con tratamiento médico o con algún remedio casero -que desde NovaMás ya os avanzábamos en este artículo-.

Nadar no aumenta el riesgo de contagio

Si te gusta la natación y disfrutas como pez en el agua no debes preocuparte. Cuando el agua fluye constantemente no hay peligro de desarrollar infecciones porque no se genera el ambiente idóneo para que las bacterias y los hongos se reproduzcan. Lo importante es incorporar la dinámica de no permanecer demasiado tiempo con el bikini mojado en un ambiente caluroso.