ALIMENTACIÓN SANA
Debido a su contenido en isoflavonas, existe un miedo a un posible efecto hormonal que sea perjudicial durante la infancia. ¿Qué dice la ciencia al respecto?
La disponibilidad y el consumo de alimentos derivados de la soja ha aumentado notablemente en nuestro país durante los últimos 25 años. Además de los alimentos de soja asiáticos tradicionales, existe una gran variedad de productos hechos a base de soja o alimentos procesados que la usan como ingrediente.
Varios factores explican la creciente popularidad de los alimentos de soja. Una son las recomendaciones dietéticas que piden un cambio hacia dietas más basadas en alimentos de origen vegetal.
Otro es el reconocimiento de que los alimentos de soja son una fuente de proteínas de alta calidad. Una tercera razón es que muchas personas conocen las investigaciones que sugieren que los alimentos de soja pueden ejercer una serie de beneficios para la salud.
¿Qué tiene la soja?
La calidad de las proteínas vegetales se considera inferior a la de las proteínas animales; sin embargo, este no es el caso de las proteínas de la soja, que contiene proteínas de alto valor biológico.
Inesperadamente, a pesar de que la soja contiene grandes cantidades de fitatos y oxalatos, la absorción de calcio de la soja es bastante buena. De hecho, la absorción de calcio de la bebida de soja enriquecida con calcio y el tofu elaborado al coagular la bebida de soja con sales de calcio es similar a la absorción de calcio de la leche de vaca.
Pero los alimentos de soja se han investigado mucho, principalmente porque proporcionan cantidades tan abundantes de isoflavonas. Las isoflavonas se clasifican tanto como estrógenos vegetales como moduladores selectivos de los receptores de estrógenos. La evidencia sugiere que estos componentes de la soja protegen contra una serie de enfermedades crónicas, pero no están exentos de controversia.
Debido a que los alimentos de soja contienen cantidades tan grandes de isoflavonas, ha surgido la preocupación de que estos alimentos puedan causar efectos adversos en algunos colectivos, como en la infancia.
Impacto de las isoflavonas en la infancia
En base a las evidencias actuales, existe un acuerdo general de que durante el primer año de vida no existen diferencias de crecimiento significativas entre lactantes que se alimentan con leche de fórmula a base de soja y quienes se alimentan con leche de fórmula a partir de leche de vaca.
Por otro lado, durante la infancia, especialmente para quienes no consumen productos lácteos con regularidad, los productos de soja fortificados con calcio representan opciones interesantes para satisfacer las necesidades de calcio.
También existe evidencia que indica que cuando se consume soja durante infancia y la adolescencia, el riesgo de desarrollar cáncer de mama se reduce notablemente.
Relativamente pocas personas presentan alergia a la proteína de soja, y la mayoría de quienes inicialmente la tienen, superan su alergia a la soja a los 10 años de edad.
Las evidencias disponibles sugieren que la soja se puede incorporar de manera segura durante la infancia y la adolescencia y que no hay evidencias de que ejerza efectos hormonales adversos en la infancia ni que afecte al desarrollo puberal.
En definitiva, la totalidad de la evidencia científica disponible en la actualidad indica que los alimentos de soja pueden ser saludables en la infancia, pero siempre se requiere más investigación para poder sacar conclusiones definitivas.