POR UN CABELLO SANO

Tu pelo sufre en verano: ¿Cómo proteger el cabello del agua del mar?

El verano es sinónimo de playa y disfrute, pero también es una de las épocas donde nuestro cabello sufre más. La exposición al sol, el agua de mar o el secador y la plancha son factores que poco a poco debilitan nuestro pelo. Por ello, es bueno conocer algunos trucos para evitar dañarlo lo mínimo. Te los detallamos.

El pelo sufre mucho en épocas de verano debido a la constante exposición al sol, al agua del mar o la infinidad de productos o aparatos que utilizamos para arreglar nuestro pelo exponiéndolo a altas temperaturas. Igual que cuidamos nuestra piel, también debemos cuidar nuestro cabello. Y es que en verano son muchos los días que disfrutamos en la playa refrescándonos con un baño. Y muchas las veces que nos encanta cómo queda nuestro pelo al salir del agua.

Un cabello con ondas surferas, pero que la mayoría de las veces sufre mucho daño con el agua del mar. Si quieres disfrutar de la playa sin estas preocupaciones, aquí van varios trucos que te ayudarán a mantener tu pelo sano sin tener que pasar a final de verano por la peluquería.

Lo primero que debes hacer es acudir a la playa con el pelo limpio. Muchas personas aprovechan este momento para aplicarse geles o mascarillas, pero es un error. Es mejor ir con el pelo limpio para evitar que sea susceptible a que el sol lo dañe.

Una mujer con el cabello suelto en la playa | iStock

Antes de sumergirte, enjuágate el pelo. Así absorberá menos sal y lo protegerás. Aplícate un acondicionador sin aclarado o un aceite protector con filtro solar para crear una barrera que lo cuide de la sal y del sol.

Cuando te bañes, mejor hazlo con el pelo suelto. Evita meterte con el cabello recogido o con horquillas. Y que tu baño dure poco tiempo si lo haces en las horas centrales del día, así podrás evitar la exposición prolongada de tu melena al sol. Una buena opción es usar gorras o sombreros.

Tras disfrutar de un buen baño, enjuágate el pelo cuanto antes con agua dulce y fría. Aplícate acondicionador y desenrédate el pelo con cuidado con un peine de púas anchas para evitar la sequedad y las roturas.

Después de la playa, lávate el pelo con un champú suave y usa un acondicionador hidratante y mascarilla nutritiva cuando sea necesario. En la elección del champú perfecto, es mejor que utilices unos libres de parabenos y sulfatos.

Una mujer aplicándose champú en el pelo | iStock

Por último, deja que el pelo se seque al aire y evita el uso de secadores o planchas.

Una mujer dejando que su pelo se seque al aire | iStock