EN LA FARMACIA

Ni pastillas ni cápsulas: ¿Qué alternativas hay para las personas que no se saben tragar los medicamentos?

Tomarse un medicamento puede ser algo muy costoso para las personas que son incapaces de tragar pastillas o cápsulas. El problema es más habitual de lo que parece y, por eso, existen muchos preparados en otros formatos que pueden facilitar la toma de las medicinas necesarias en cada caso.

Una mujer a punto de tragarse un medicamento en cápsulaiStock

Hay ciertas personas que por la edad o problema personal no son capaces de tragar las presentaciones en comprimidos que hay en la farmacia. Normalmente esto suele ocurrir en pacientes pediátricos, bebés o niños y en pacientes de edad avanzada, que tienen problemas de deglución.

¿Qué alternativas tenemos para este tipo de pacientes?

En la farmacia tenemos otro tipo de presentaciones, además de los comprimidos o las cápsulas, que son:

  • Jarabes: son preparaciones viscosas con azúcar, que se suelen utilizar mucho en la población pediátrica, normalmente se le añade alguna esencia para mejorar el sabor y tener mejor aceptación.
  • Soluciones orales: los principios activos se disuelven en soluciones acuosas sin añadir glucosa, normalmente la mayoría de los antibióticos de los niños.
  • Supositorios: cuya vía de administración es la vía rectal y tiene un efecto mucho más rápido que la vía oral, debido a la gran cantidad de vasos sanguíneos que hay en la zona, muy útil para bajar la fiebre en bebés y niños de forma rápida, cuando no toleran la vía oral.
  • Óvulos vaginales: se administran vía vaginal, en mujeres, preferiblemente por la noche para evitar que se caiga el producto. Normalmente para tratar infecciones en la zona íntima de una forma más específica en el lugar de acción.
  • Comprimidos bucodispersables: se trata de un comprimido que se encuentra liofilizado y en cuanto se pone en contacto con un medio húmedo, al chuparlo, se disuelven en la boca, en cuestión de segundos.

  • Sobres para disolver o comprimidos efervescentes: polvo, granulado o comprimidos que se disuelve en agua y favorece su toma en personas con problemas de deglución.
Medicamentos en diversos formatos de comprimidos | Pexels

¿Qué son las fórmulas magistrales?

Es cierto que no todos los medicamentos se encuentran elaborados en estas presentaciones, sólo los más frecuentes, por lo que cuando no existe una alternativa que no sea en pastillas en la dosis que necesitamos, en farmacia tenemos una alternativa: las fórmulas magistrales. Se elaboran de forma individualizada y son medicamentos destinados a un paciente en concreto, que se preparan por un farmacéutico, o bajo su dirección, y se pueden dispensar tanto en las oficinas de farmacia como en los servicios farmacéuticos hospitalarios.

Las fórmulas magistrales siempre deben estar prescritas por un médico y en ellas debe describir los principios activos que lleva y la forma farmacéutica (jarabe, supositorios, colirio…).

Este tipo de elaboración se lleva a cabo mucho en bebés, por ejemplo, cuando tienen problemas de regurgitación, se suele elaborar el omeprazol en jarabe.

¿Podemos partir o triturar las pastillas?

Pues como norma general no, hay en algunos casos que la forma farmacéutica sí lo permite, pero, por ejemplo:

  • Las cápsulas no se deben abrir porque su recubrimiento puede ir dirigido a un lugar de acción en concreto y si las abrimos podemos perder su eficacia.
  • Los comprimidos, los que tienen ranura pueden partirse, el resto de comprimidos si se encuentran recubiertos tampoco debemos partirlos o triturarlos porque como hemos comentado anteriormente podríamos perder su eficacia.