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Nos divorciamos: ¿Cómo se lo decimos a nuestros hijos?

Qué hacer y qué evitar durante el proceso de divorcio cuando en la familia hay niños o adolescentes.

Una niña asustada ante la pelea de sus padres.iStock

El divorcio o separación se vive y se siente de forma distinta en función de cada pareja; sin embargo, es una situación que involucra a toda la familia y siempre debemos tenerlo en cuenta.

Como padres, debemos ser conscientes de que para que nuestros hijos estén bien, nosotros debemos estar bien primero, al menos lo mejor posible emocionalmente, anímicamente, psicológicamente… por lo que es imprescindible velar por uno mismo y buscar la ayuda necesaria en esos momentos tan dolorosos.

Contar con una red de apoyo, ya sea familia o amigos, que den soporte y ayuda durante el proceso, será de gran beneficio para quien atraviesa un divorcio.

A la hora de informar de la decisión a los hijos, es imprescindible saber qué debemos evitar y qué debemos potenciar, para que lo vivan los mejor posible.

Comunicar el divorcio a los hijos

Una de las situaciones más complicadas por las que tienen que pasar las parejas que se separan es la de comunicar a sus hijos la noticia.

Es importante tener en mente algunas reacciones o comportamientos que podemos evitar, con el fin de ayudar a los hijos (niños o adolescentes) a transitar de una mejor manera la situación.

Qué no hacer al hablar del divorcio

  • Hablar mal de la pareja, transmitir a los hijos cosas que desmeriten o dejen mal parado al excónyuge.
  • No decirles nada al respecto, pensar que por ser niños no merecen ninguna explicación y actuar como si no estuviera pasando nada.
  • Guardarnos nuestros sentimientos y fingir que todo va de maravilla.
  • Presentar de inmediato a una nueva pareja a los hijos.
  • Restringir o evitar la comunicación con papá o mamá. En la mayoría de los casos no hay restricciones legales al respecto, por lo que no se debe negar la convivencia.

Recomendaciones al hablar de divorcio con los hijos

Definitivamente es un momento muy susceptible para todos y puede ser que se flaquee en la estabilidad emocional. Por lo tanto, como padres es importante que busquemos un poco de calma y serenidad interna antes de transmitir el mensaje. Lo que se recomienda hacer es:

  • Estar dispuestos a escuchar a nuestros hijos, sus emociones y sentimientos, sus miedos, temores y dudas al respecto.
  • Ya que hemos escuchado, también es importante comenzar a validar esas emociones: "Es normal que te sientas así, es un momento difícil, pero todos estaremos bien, puedes estar seguro de eso".
  • Dejar bien claro que la decisión de la separación ha sido de los padres, y por lo tanto los hijos no tienen nada que ver en ello. Se puede reforzar así: "Esto lo hemos decidido nosotros, como adultos, vosotros no tenéis la culpa de nada… os queremos igual y cada día más".
  • Mantener el diálogo abierto para estar atentos a lo que necesiten preguntar conforme avanzan los días.
  • Ser sinceros al respecto, pero teniendo la prudencia necesaria para elegir qué transmitimos y qué no, de acuerdo a la edad de cada hijo.