TRISTEZA EN NAVIDAD

Navidad sin un ser querido: Cómo afrontar esta época tan familiar

No todas las navidades nos evocan recuerdos felices y alegres. A veces los recuerdos más tristes se intensifican en esta época. En este artículo hablamos sobre lo que podemos hacer si nos encontramos ante unas navidades sin un ser querido.

La Navidad suele ser una época descrita como familiar, bonita, especial… sin embargo, también puede traer consigo muchas expectativas difíciles de cumplir y una carga emocional importante.

Para muchas personas, la época de Navidad implica intensificar los acontecimientos emocionalmente negativos o de malestar. Si cuando llega el mes de diciembre, a nivel emocional no está todo equilibrado, parece que la intensidad con la que lo vivimos es mucho más fuerte.

¿Qué hacer en Navidades si hemos perdido recientemente a un ser querido?

A continuación, se describen algunas recomendaciones para hacer frente a una situación como esta:

  • Autocompasión: es muy importante dejar las autoexigencias a un lado. Es decir, por ser Navidad no tenemos que estar alegres o felices, simplemente tenemos que estar y con eso es más que suficiente.

    Permítete estar, sea como sea que estés, aceptándote a ti y a tus emociones. Escúchate para identificar qué es lo que necesitas para tu bienestar. Lo que acabamos de describir es la autocompasión, una forma de ser flexible contigo misma y cuidarte.

    Por ejemplo: si un día determinado no sientes que tengas mucha energía puede que ese día no tengas que autoexigirte lo mismo que te autoexiges otros días en los que tu nivel de activación y energía es mayor.

  • Duelo: si has perdido a un ser querido recientemente estás viviendo un proceso emocional con distintas etapas, llamado duelo. Para superar ese duelo de forma saludable es fundamental que no seas impaciente, que pases tiempo contigo misma y vayas adaptándote poco a poco a las distintas necesidades emocionales que puedan aparecer.

    Por ejemplo: si sientes tristeza, puede que el cuerpo te pida tener un día tranquilo, ver fotos de la persona a la que echas de menos, pasar tiempo a solas o estar acompañada, escribir tus emociones y reflexiones o realizar una actividad agradable. Si eso es lo que necesita tu emoción para ser satisfecha, ¿por qué negártelo?

  • Ritual: a veces pensamos que, si no le damos importancia a algo, o si no lo pensamos o si no le damos espacio, ese algo va a desaparecer. Pero este pensamiento está muy lejos de la realidad.

    Cuanto más escondas una preocupación o una emoción, más va a crecer en tu interior. Si has perdido a un ser querido puedes hacer con tu familia o a solas un ritual que te permita recordarle de forma simbólica. Por ejemplo: poner unas velas, llevarle unas flores al cementerio o escribirle una carta. Lo que te salga.

  • Expresión emocional: las emociones pueden ser muy intensas o pueden generarte mucho malestar si estás en un proceso como este. Es importante que busques apoyo en tus seres queridos y te sientas libre y capaz de expresarte.

    Identifica tus emociones y déjalas salir. Puedes expresarte verbalmente, por escrito o mediante otro tipo de expresiones con las que te sientas cómoda, como por ejemplo con la pintura o la música. Apóyate también en seres queridos si lo necesitas.

  • Disfrutar de la navidad de otra forma: aunque estés en una situación tan desagradable como puede ser una pérdida, también puedes vivir las navidades de una forma que te genere bienestar si llevas a cabo lo recomendado en los puntos anteriores. También es muy buena práctica agradecer lo que sí tienes y permitirte mantener las tradiciones familiares sin autoexigencia, de una forma más flexible que otros años.
  • Pedir ayuda profesional: a veces se nos enquistan sentimientos y/o pensamientos y el duelo se complica. Si se da ese momento, es fundamental pedir ayuda psicológica y no esperar a que pase demasiado tiempo.