Los métodos que sí funcionan y los que no para eliminar el mal olor corporal

En verano es normal que sudemos con mucha frecuencia, lo que puede ir acompañado de un mal olor. Aun así, hay personas que por naturaleza tienen un olor corporal más fuerte que el resto, aunque tengan unas rutinas de higiene adecuadas y se aseen diariamente.

En términos médicos, estas personas tienen un problema llamado 'bromhidrosis'. Hace referencia a la sudoración corporal excesiva, ya sea en axilas, pies, genitales o parte del tórax.

Productos que previenen el mal olor corporal

La primera solución que a la mayoría de gente se le viene a la cabeza es el uso del desodorante. Aplicarlo antes de salir de casa especialmente en las axilas, ayuda a prevenir los malos olores y a controlar la sudoración gracias a la presencia de sustancias antibacterianas.

Hay muchas más opciones en el mercado, desde los antitranspirantes tradicionales hasta los desodorantes naturales e incluso los desodorantes ácidos. Hay que aclarar que estos dos productos ayudan a mantener las axilas con un olor fresco. Sin embargo, se diferencian en que los antitranspirantes controlan y reducen la producción y liberación del sudor, mientras que los desodorantes inhiben y encubren el mal olor corporal haciendo que huelas mejor.

El olor corporal también está relacionado con la alimentación

El olor de tu cuerpo no solo está relacionado con los productos que te aplicas, sino que también depende de tu alimentación. Por ejemplo, las verduras reducen el número de bacterias olorosas en las axilas generando así un aroma más agradable. Por otra parte, beber mucha agua, así como comer alimentos hidratantes como son el pepino o la sandía ayuda a eliminar los malos olores.

Además, es conveniente eliminar o reducir de tu dieta alimentos que contengan compuestos que el cuerpo no pueda descomponer. El ajo, la cebolla o el alcohol fomentan la 'bromhidrosis' ya que tienen componentes que el organismo rechaza expulsándolos a través del sudor.

Algunos remedios caseros que ayudan a eliminar el mal olor de tu cuerpo

• Tener una buena higiene corporal. Esto es básico para mantener un buen olor. Esta limpieza debe ser más profunda en el caso de aquellas personas que tengan más predisposición a sudar, siendo recomendable que se aseen al menos dos veces al día con jabón. Además, depilarse las axilas siempre ayuda a que no se retenga el sudor en los pelos que luego provoca el mal olor.
• Lavar la ropa. Es indispensable lavar la ropa que se utiliza en el día a día con frecuencia especialmente ahora en verano. Es recomendable llevar ropa de fibras y origen natural como el algodón, la lana y la seda. Estas prendas al ser transpirables permiten que la piel respire y no genere tanto sudor.
• Técnicas de relajación. En algunas personas las prácticas como el yoga o la meditación ayudan a controlar el estrés que provoca la sudoración.

Errores a la hora de querer eliminar el mal olor de nuestro cuerpo

Si el mal olor es ligero no es recomendable usar un antitranspirante. Estos productos al bloquear la transpiración de las glándulas sudoríparas pueden aumentar las bacterias causantes del mal olor al no dejar al cuerpo que se deshaga de sus residuos en forma de sudor. Es mejor usarlos en contadas ocasiones y recurrir siempre que se pueda al desodorante.

Aunque el foco de atención del mal olor corporal suele estar en las axilas, no es la única zona donde se puede acumular. Las mismas glándulas productoras del mal olor que se encuentran en las axilas pueden encontrarse también en las ingles por ejemplo. Aplicar desodorante en otras partes del cuerpo puede provocar irritación y no conseguir el efecto deseado. Para ello, lo mejor es llevar bien aseadas esas partes del cuerpo y usar el desodorante solo en las axilas.

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