¿Es mejor dormir con o sin ropa?

Una de las peores situaciones que experimentamos durante el verano es el insomnio causado por las altas temperaturas. Lejos de rendirnos y no dormir, algunas personas optan por darse una ducha fría nocturna para refrescarse antes de tumbarse en la cama. Sin embargo, al cabo de los minutos, el calor y el sudor vuelven a hacer acto de presencia. De esta forma, son muchos los que buscan soluciones a las calurosas noches a las que se enfrenta el territorio español.

Una de las opciones más habituales es dormir sin ropa, completamente desnudos, una alternativa que se traduce en una cómoda forma de conciliar el sueño. Sin embargo, no es necesario esperar a que suban las temperaturas y el sudor recorra todo nuestro cuerpo para evitar el pijama. Y es que, si las temperaturas lo permiten, es una opción que aporta numerosos beneficios para nuestra salud. ¡Así que no lo hagas únicamente en verano!

Por qué es saludable dormir sin ropa

Sea por comodidad o simplemente por el calor, dormir completamente desnudo puede mejorar la salud e, incluso, afectar positivamente a las relaciones íntimas que tengamos. Estos son los principales beneficios de dormir sin ropa:

• Ayuda a regular la temperatura corporal.
• Refuerza nuestra memoria, ya que al tener un sueño plácido y reconfortante, nuestro cerebro trabajará con tranquilidad.
• Evitaremos una mala circulación de sangre a causa de las cinturas elásticas y los puños de las mangas.
• Permites que la piel respire y ayudas a que se regenere sin dificultades.
• Las hormonas antienvejecimiento y la melatonina se liberan con mayor facilidad con una temperatura corporal adecuada. Esto ayudará a nuestro organismo a regular nuestros ciclos del sueño.
• Ayudas la liberación de la hormona del crecimiento y el proceso de reparación nocturno del hueso y los músculos.

Dormir desnudos y en pareja

No obstante, estos beneficios se incrementan e intensifican si lo hacemos acompañados. Las parejas que duermen sin ropa suelen sentir un mayor apego y conexión entre ellas. Y es que el contacto de la piel aumenta la liberación de la oxitocina, la cual se trata de la hormona del amor y los lazos afectivos. De esta forma, estas parejas terminan siendo más fuertes y puede que más felices.

Además, dormir desnudos puede reducir el nivel de cortisol, suavizando nuestro estrés y ayudando a tener menos sensación de hambre al despertarnos. En resumen, podemos ganar en calidad de vida, pues establecer rutinas del sueño va a condicionar para bien nuestra salud, y más si decidimos prescindir de la ropa.