SIN VELLO
Te explicamos por qué los meses más frioleros son los más adecuados para iniciar el tratamiento.
Verano, tiempo de tumbonas, bañadores y helados. Te preparas para pasar el día en la playa, pero horror: ¡No te has depilado! Te ves obligada a recurrir a métodos instantáneos como las cuchillas, pero sabes que, a los tres días, te vas a encontrar en esa misma situación.
Cuándo empezar la depilación láser
La depilación láser se ha convertido en un método estrella para no tener que vivir (siempre) este tipo de casos. De todas formas, son muchas las personas que aún no se han atrevido a adentrarse en este mundo.
¿Cuándo empiezo el tratamiento? Esta es la gran duda. La respuesta es tan sencilla como lógica. La época más fría del año, el invierno, es el momento ideal para empezar el proceso. Nos abrigamos con infinidad de capas con la esperanza de que el frío no cale en nuestros huesos, por lo que obstaculizamos el paso de los rayos de sol a nuestra piel, y ese es precisamente el motivo por el cual el invierno es la estación perfecta.
Por esta misma razón, otoño es igual de válido, ya que dejamos el bañador a un lado y empezamos a rescatar las chaquetas del fondo del armario.
Por qué no te puede dar el sol cuándo haces el láser
La melanina, el pigmento que se encarga tanto del color de nuestra piel como del pelo, tiene un papel muy importante en este proceso y resulta clave para entenderlo. Cuando nos bronceamos en verano, alteramos nuestro pigmento, por lo que el láser puede llegar a confundir nuestra epidermis con vello, y eso puede provocar que el tratamiento no se aplique bien.
Es por eso que las estaciones del año donde nuestra piel tiene menos exposición solar resultan ideales, porque el contraste de pigmento entre el vello y la piel es mucho más elevado. De esta forma, vamos a conseguir que el láser penetre mucho mejor y extirpe las raíces de forma más eficiente.
En verano no se recomienda el láser
Aunque no es recomendable, nada prohíbe realizar el tratamiento en los meses más calurosos. Las precauciones que deberemos tomar son mucho más elevadas y van “en contra” de lo que se suele hacer en verano por norma general: pasar horas bajo el sol.
Para evitar males mayores en nuestra dermis, debemos evitar exponernos tanto antes como después de la sesión depilatoria. Por el mismo motivo, tampoco se recomendaría la primavera, ya que es cuando empezamos a descubrir algunas partes del cuerpo.
Qué hacer si el láser duele
A pesar de que los tratamientos con láser han mejorado mucho respecto a hace una década, es cierto que a algunas personas les resulta molesto, dado que el dolor es algo muy subjetivo.
En este sentido, da igual la época del año en que te depiles. En los casos en los que es realmentees molesto, se debe consultar con la persona que está realizando el tratamiento y no buscar remedios o usar cremas sin antes comprobar su efectividad. Las cremas anestésicas están desaconsejadas y, por este motivo, antes de su uso es importante consultar a la especialista.
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