Te decimos qué hacer
El dolor de cabeza es un problema frecuente, tanto en niños como en adultos. Habitualmente es algo que cuando se padece genera preocupación por si hay algo más importante detrás.
¿Cuáles son los signos con los que nos debemos alarmar o ante los que debemos consultar?El dolor de cabeza, a pesar de lo que puedas pensar, es algo bastante frecuente también en niños. De hecho, es el problema neurológico más frecuente y por el que más se envían al especialista en neuropediatría. También es un motivo frecuente de acudir a urgencias por la angustia que genera en casa. ¿Cuándo ir al pediatra? ¿Y a urgencias?
Primero debes conocer que, por suerte, la mayoría de dolores de cabeza en los niños no son debidos a problemas graves, como lesiones tras un golpe o tumores. En ocasiones pueden ser secundarios a procesos banales, como infecciones víricas o traumatismos leves. En otras ocasiones son primarias, es decir, nada justifica ese dolor. Igual que en los adultos está la migraña y la cefalea tensional, cada una con sus particularidades.
¿Cuáles son esos signos que nos deben hacer ponernos más alerta y consultar?
1. Vómitos persistentes.
2. Que el dolor de cabeza sea mayor al orinar, al defecar o con la tos.
3. Un dolor de cabeza que haga que tu hijo se despierte en mitad del sueño por la noche o nada más levantarse.
4. Cambio notorio en el carácter del niño, que veas que el dolor de cabeza le repercute en sus estudios o interfiere con el juego o su actividad habitual.
5. Si el dolor de cabeza, a lo largo del tiempo, aumenta en frecuencia o intensidad.
6. Un dolor de cabeza asociado a convulsiones.
7. Cualquier cosa rara en tu hijo, como disminución del nivel de conciencia, movimientos raros, rigidez de nuca o visión doble.
8. Cuando el dolor de cabeza no mejora con la medicación habitual para el dolor, como el ibuprofeno o el paracetamol.
9. Dolor de cabeza muy localizado y siempre en el mismo sitio.
10. Si el dolor de cabeza está asociado a dolor de barriga, tristeza o rechazo a ir al colegio, estate ojo avizor, no vaya a ser que haya un problema en el colegio que justifique la aparición de ese dolor.
¿Esto quiere decir que tengas que salir directamente corriendo para urgencias? No, definitivamente no. Si no es nada muy alarmante, puedes pedir cita para el día siguiente y que vuestro pediatra valore el niño. Otra cosa son las convulsiones, la rigidez de nuca o la visión doble, eso sí que son signos muy alarmantes por los que deberías acercaros a un servicio de urgencias.
¿Qué va a hacer vuestro pediatra?
Preguntaros por la historia del dolor de cabeza, por los signos de alarma y lo explorará. ¿Es necesario hacerle alguna prueba de imagen? No siempre. En función de la historia y la exploración, así se decidirá.
¿Cómo tratamos el dolor de cabeza en los niños?
Pues con analgésico. Habitualmente ibuprofeno o paracetamol en jarabe o comprimidos. Si con eso no cede, será vuestro pediatra quien os diga qué más opciones tenemos. En caso de la migraña ya sabes que una habitación a oscuras, con poco ruido y un buen descanso va muy bien. Cuando las crisis de dolor son muy seguidas o muy severas, hay tratamientos preventivos, pero debe ser vuestro pediatra quien te informe si está indicado en tu hijo.
La migraña tiene factores desencadenantes (https://neuropediatra.org/2017/01/23/migrana-mejor-sin-chocolate/). Si conoces aquellos que la desencadenan en tu hijo, podrás evitarlos. Aún así, siempre es bueno evitar los ambientes muy cargados, la exposición solar importante sin protección o la falta de sueño.
Si ves que tu hijo no tiene uno o dos días sueltos de dolor de cabeza, sino que es más frecuente, puedes hacer como una especie de calendario o diario del dolor, con sus características. Eso puede ser también de mucha utilidad para cuando vayas al médico. Recuerda, lo importante es lo que las familias contáis y lo que el médico ve en la exploración.