CONSEJOS DE LIMPIEZA

Deja el fregadero así de brillante limpiándolo de esta manera

Cada vez que lavamos los platos, el fregadero acumula suciedad que hacen que sea una de las zonas con más gérmenes de la cocina. Deberíamos limpiarlo cada cierto tiempo, y de forma más exhaustiva que pasar la bayeta.

¿Sabías que el fregadero de tu cocina es de las zonas que más gérmenes acumula? Y es que cada vez que lavamos los platos o enjuagamos algo, la suciedad se queda en el fregadero por lo que habría que limpiarlo de una forma exhaustiva y no simplemente con una bayeta.

¿Cuáles son los pasos a seguir para dejarlo impoluto y que brille como el primer día?

Lo primero que debes hacer es quitar la suciedad superficial que ves a simple vista. Para eso usaremos agua y el mismo jabón que usamos normalmente para los platos, frotando con un estropajo. ¡Y no te olvides del grifo que también debes limpiarlo!

Luego retiramos la espuma y echamos un chorro de lejía en el fregadero. Con el mismo estropajo (no te olvides de usar los guantes para no destrozar tus manos), frotamos para quitar todas las impurezas. Lo dejamos actuar entre cinco y diez minutos, y volvemos a aclarar hasta asegurarnos de que no queden restos de lejía. Ahora sécalo con papel de cocina.

Para terminar y conseguir ese brillo que buscamos, necesitamos un producto de limpieza adecuado para vitrocerámica, y lo aplicamos por toda la superficie. Frotamos con el estropajo para asegurarnos de que impregna bien todas las superficies, y echamos una segunda capa del limpiador de vitrocerámica. Dejamos que repose durante diez minutos, y retiramos el producto sobrante con una bayeta. Estos pasos dejarán el fregadero limpio y con un aspecto como el primer día.