¿QUÉ ES MEJOR?
Si te planteas qué te sale más a cuenta, alquilar una vivienda o comprarla, en este artículo una experta de economía te da las claves para que analices tu situación y lo que supone cada opción, para que decidas qué es lo que más te conviene.
Si estamos pendientes del sector inmobiliarioy nos fijamos en los datos que recoge el informe Radiografía del mercado de la vivienda primer semestre 2024, publicado por Fotocasa, el 76% de la población vive en una casa en propiedad -ya sea suyo el inmueble o se le permita utilizarlo-, mientras que el 24% lo hace en vivienda en alquiler.
Sin embargo, la suerte de ser propietario de una vivienda corresponde al 61% de la población española, siendo más frecuente poseer inmuebles entre los más mayores.
De esta manera, solo el 10% de los españoles entre 18 y 24 años tienen una casa en propiedad.
El porcentaje sube al 33% entre los que tienen de 25 a 34 años y al 58% entre los que tienen entre 35 y 44 años.
La cantidad se incrementa hasta el 74% entre los que tienen 45 y 54 años y al 80% entre los que tienen entre 55 y 75 años.
La mayoría de los españoles querrían tener una vivienda en propiedad, pero esto no siempre es sencillo, ya que la cantidad de ahorro para dar la entrada y la necesidad de que la cuota mensual de hipoteca pueda ser asumida por el comprador alejan a un porcentaje importante de personas de poder adquirir una vivienda.
Tener una casa en propiedad supone adquirir un bien que económicamente se mueve en consonancia con el mercado, por lo que, si esperamos el tiempo suficiente, su valor casi seguro que se incrementará con el paso del tiempo.
Además, cuando vendemos la vivienda en el futuro podremos recuperar toda o una parte importante de la inversión, entendamos por la inversión el desembolso realizado para comprar la casa, pagar los gastos de compra, los intereses, reformas, impuestos y demás costes asociados a tener una vivienda en propiedad.
Adicionalmente, cuando compramos una casa nos olvidamos (a priori) de mudanzas futuras, incrementos en cuotas de alquiler y negociaciones con los propietarios. La casa ya es nuestra.
Vivir de alquiler es pagar una renta mensual sin adquirir un compromiso más allá que el del tiempo que dura el contrato. No nos ata a permanecer con alguien, en un lugar o una vivienda que quizás no cumplan con nuestras necesidades en un tiempo.
Además, nos permite vivir de manera independiente sin necesitar tener grandes ahorros.
Si eres de los que piensa que alquilar siempre es mejor opción, recuerda que vivir en alquiler nos aporta flexibilidad y un compromiso económico menor a cambio de asumir que el pago mensual de la renta es un coste que no recuperamos.
¿Preferirías vivir de alquiler durante 30 años pagando una renta mensual (revisable anualmente en función del IPC y la normativa de vivienda vigente en cada momento) o pagar durante 30 años una cuota de hipoteca mensual y, al final de ese periodo, tener una casa en propiedad?
Si piensas que comprar una casa es la mejor opción, recuerda valorar que, aunque adquirirla supone saber que algún día terminaremos de pagarla, mientras tanto, es un compromiso económico sustancial que supone muchos más costes.
Es decir, si compro una vivienda que vendo diez años por más dinero, no necesariamente habré ganado con la operación si le resto los gastos de la compra, el IBI anual, la cuota de la comunidad, la reforma que hice y los intereses satisfechos de la hipoteca.
En realidad, no hay una opción mejor que la otra, ya que cada una puede cubrir las necesidades de diferentes personas en distintos momentos de sus vidas.