PODOLOGÍA
Cuidar nuestros pies en la transición del verano al invierno es esencial para mantener su salud y comodidad. Por eso, antes de volver definitivamente al calzado cerrado, hemos entrevistado al Dr. Alfredo Soriano, podólogo del centro Clinisalud Albacete, para que nos de sus recomendaciones.
Con la llegada del otoño, muchas personas se preparan para hacer la transición de las sandalias y el calzado abierto al zapato cerrado. Esta transición puede ser un desafío para nuestros pies, que han estado expuestos al aire y al sol durante el verano. Para obtener consejos valiosos sobre cómo tratar nuestros pies en esta temporada de cambio, entrevistamos al Dr. Alfredo Soriano, podólogo del centro Clinisalud Albacete.
Para comenzar, el Dr. Soriano subraya la importancia de una buena autoinspección de nuestros pies, antes de dar la bienvenida al calzado cerrado. Después de un verano de exposición al aire libre, es crucial observar si hay señales de daño, como uñas amarillas, grietas o sequedad en la piel.
Pero esto no es suficiente, el experto recomienda programar una visita al podólogo, al menos, una vez al año, siendo ahora un momento idóneo al encontrarnos en plena transición del verano al invierno.
Durante la visita al podólogo, se realizará una quiropodia, un tratamiento que implica un corte profesional de las uñas, una minuciosa inspección de la planta del pie y la eliminación de durezas y grietas. Este proceso no se limita a fines estéticos, sino que tiene un enfoque clínico y profesional. El podólogo también puede identificar patologías que uno no puede detectar en casa, lo que lo diferencia de una pedicura convencional.
El Dr. Soriano destaca algunas lesiones comunes que pueden surgir después de la temporada de vacaciones de verano. Entre ellas, las grietas debido a la sequedad de la piel ocupan un lugar destacado en la lista. Además, advierte sobre la posibilidad de contagio de virus, como el virus del papiloma, que puede propagarse en lugares compartidos, como duchas de hoteles y piscinas.
Otro aspecto importante a considerar es el uso prolongado de esmaltes de uñas durante el verano. Los productos químicos presentes en los esmaltes pueden causar decoloración de las uñas y, en algunos casos, pueden ocultar la presencia de hongos. Es esencial eliminar los esmaltes y prestar atención a la salud de las uñas después de la temporada de verano.
El uso frecuente de calzado abierto, como chanclas, durante el verano también puede llevar a dolores en el talón y a afecciones como la fascitis plantar debido a la falta de soporte adecuado. "Estamos muchos meses con el calzado cerrado, que nos da sujeción, y cuando llega el verano y destapamos nuestro pie con calzado muy inestable, podemos sufrir este tipo de dolores musculares", asegura.
Con la llegada del otoño, surge la pregunta de cuál es el calzado más adecuado para la salud de los pies. Pero como sabemos que las amantes de las tendencias preferirán sufrir antes de no ir a la moda, hemos preguntado al doctor sobre los calzados que son tendencia este otoño: las bailarinas, los zapatos destalonados, los zuecos y las botas moteras.
Entre estas opciones, Soriano apunta que las botas son una excelente opción, "ya que nos da una buena sujeción al tobillo y normalmente suelen tener plantillas extraíbles -por si el paciente lleva una plantilla ortopodologica-, la suela suele ser bastante estable y, además, tiene una estructura que ayuda a que si el suelo está mojado, el paciente no se escurra". Además, su puntera ancha protege las uñas, evitando que se encarnen.
En contraste, las bailarinas son consideradas por el experto entrevistado por NovaMás como la opción menos favorable, especialmente en climas fríos, ya que no permiten el uso de calcetines gruesos. Su falta de sujeción, horma estrecha y suela delgada pueden causar molestias y no brindar la protección necesaria al caminar.
El podólogo también sugiere considerar el concepto de "zapotilla", un tipo de calzado que combina lo mejor de los zapatos y las zapatillas. También conocidas como sneakers, son cómodas, tienen suelas flexibles y plantillas extraíbles, lo que las hace ideales para el uso diario y "permite combinar tratamientos podológicos con un calzado normal".