PSICOLOGIA
Las decisiones son algo estrictamente personal porque lo que para uno es una buena decisión para otra persona no lo es en absoluto. Aquí tienes algunas recomendaciones para sentirte feliz y en paz con las decisiones que debas tomar.
¿Qué son las buenas decisiones? Las buenas decisiones no siempre van ligadas a un resultado de éxito a corto plazo. Es importante tener en cuenta que si partimos de la base de que éxito es la obtención de un resultado que nos hace felices, no siempre vamos a obtenerlo de forma inmediata cuando tomamos una buena decisión.
En este sentido, los beneficios de las buenas decisiones pueden verse a medio y largo plazo. Por otro lado, el llamado éxito no tiene por qué medirse en un resultado material o cuantitativo, sino en la serenidad y tranquilidad que nos produce esa decisión.
Si pudiéramos definir el concepto de "buena decisión" diríamos algo como lo siguiente: una buena decisión es aquella que va en sintonía con nuestra identidad y nos acerca a aquello que verdaderamente somos según nuestros valores e intereses.
Por ejemplo: una buena decisión no es estudiar la carrera que más salidas profesionales supuestamente tiene, sino aquella que realmente nos hace sentir bien y nos gusta. Si elegimos la carrera que nos gusta, a partir de ahí se pueden ir tomando otras buenas decisiones que nos permitan sacar adelante esa carrera a nivel profesional por mucho que inicialmente no tuviera buenas salidas.
Recomendaciones para tomar buenas decisiones
Teniendo todo esto en cuenta, veamos a continuación qué puedes hacer para tomar buenas decisiones:
1. Que nadie elija por ti: No hay nadie mejor que tú para tomar las decisiones de tu vida. Las buenas decisiones tienen que ir acompañadas de un sentimiento y nadie puede sentir por ti. Eres tú quien tiene que conocerse para saber lo que le gusta y así tomar decisiones en base a eso. Por ejemplo: en la elección de pareja, de ropa, de comida… solo tú sabes lo que te hace sentir la persona, solo tú sabes cuánto de cómoda estás con esa prenda de ropa y sólo tú sabes cuánto te apetece determinada comida.
2. Dedica tiempo a aquello que te gusta: Si dedicas tiempo solo a aquello que "debes" hacer y no a lo que te gusta, llegará un momento en el que no sepas lo que te gusta, por tanto, te habrás distanciado enormemente de quién eres, de tu propia identidad. Por ejemplo: si te gusta la música, pero nunca le dedicas tiempo, llegará un momento en el que la música deje de formar parte de tu vida.
3. Dale importancia a tus emociones: Todas y cada una de tus emociones te transmiten una información importante de ti. Si las evitas o las rechazas, a quien estás rechazando es a ti misma. Por tanto, es muy importante que le des importancia a lo que sientes. Por ejemplo: si algo te genera tristeza o ansiedad, puede que esa actividad no sea la más recomendable para ti, por tanto, forzarte solo te llevará a perderte a ti misma.
4. Descansa: si te pasas el día de un lado para el otro, con una agenda apretadísima, ¿entonces cuándo reflexionas?, ¿cuándo te paras a disfrutar de verdad? El descanso es importante, no solo para nuestro día a día sino también para detectar cuándo necesitamos cambios, ya que no siempre nos va a gustar lo mismo. Por ejemplo: con el confinamiento (que nos obligó a todos a parar) muchas personas se dieron cuenta de lo infeliz que les hacía su trabajo y dedicaron tiempo a buscar un nuevo empleo que se adaptara mejor a sus preferencias e incluso algunas personas empezaron a formarse en una nueva profesión.
5. Rodéate de personas que te hagan sentir bien: Esmuy importante dedicar tiempo a las personas que verdaderamente nos importen. Muchas veces vamos a cenas y eventos por compromiso. Por tanto, te animo a detectar con quién dedicas tiempo por "compromiso" y reflexionar sobre ello. Las personas necesitamos sentirnos apoyadas y acompañadas, pero no de cualquiera. Por ejemplo: amistades antiguas que te generan rechazo, pero las sigues manteniendo o amistades recientes a las que sientes que les debes algo.
En conclusión, para tomar buenas decisiones es importante que te conozcas bien y como estamos en continuo cambio, que dediques tiempo a seguir conociéndote más y más. Conocerte a ti mism@ es la clave más importante para tomar buenas decisiones. Recuerda también que tus buenas decisiones no tienen por qué ser las mismas que las decisiones del de al lado.