SIN RIESGOS

Cómo tener la nevera perfecta: Limpia, ordenada y sin bacterias

Si queremos que nuestra nevera dure más, sea más eficiente, conserve mejor los alimentos y tanto ella como nuestra cena estén libres de bacterias, debemos seguir algunas recomendaciones.

A veces no somos conscientes de los afortunados que somos teniendo una nevera en casa. Trabaja 24 horas al día, 365 días al año durante unos 16 años de vida, sin descanso. Es el electrodoméstico que más trabaja de toda la casa. Hace un esfuerzo enorme en mantener nuestros alimentos, ralentizando el rapidísimo crecimiento de microorganismos y así poder conservarlos más tiempo.

Recomendaciones para mantener la nevera sin bacterías

  • Limpiemos la nevera. Elige un día en el que no haya mucha comida, almacénala junta y dedícale tiempo a la nevera, con un producto específico o simplemente con lejía y un buen aclarado, volveremos a empezar de cero.

    Es importante limpiar lo que se ve, pero más aún lo que no se ve, las juntas de la puerta, donde se apoyan las bandejas o en los huecos de los cajones se acumularán más las bacterias, les encantan los recovecos y se hacen fuertes. Tan importante es limpiarla como secarla correctamente, que la humedad es la gran aliada de mohos.

  • Mantén la temperatura: la nevera debería estar programada entre 5 ºC y 8 ºC, pero para que esto se mantenga, debemos evitar sobrecargarla de alimentos y dejar espacio entre ellos para que el aire circule. Evitar dejar las puertas abiertas reducirá en un 7% la pérdida de frío.
  • Colocación: En la parte de arriba pondremos queso, yogures, embutidos y comida cocinada. Todo debe estar correctamente envasado y cerrado para evitar contaminaciones indeseadas. Esto es importante para todos los alimentos.

    En la zona media (encima de los cajones) encontramos el sitio perfecto para carne y pescado. Ya sabemos que la mejor manera de descongelar es 24 horas en la nevera (nunca a temperatura ambiente) y este lugar es el ideal. No olvidemos poner un plato debajo para que los líquidos que escurran no nos ensucien todo, son otro gran foco de bacterias.

    En los cajones pondremos frutas y verduras que requieran frío (no todas lo requieren, como tomates, plátanos, cebollas…), podemos pasarles un paño antes de guardarlas, pero no lavarlas completamente o se estropearán antes. Será importante dedicar un momento a sacar las que ya estaban antes de colocar las nuevas. De otra manera, vosotros y yo sabemos qué va a ocurrir con la que se quede debajo.

  • Evita el papel y cartón, como los envases que agrupan los yogures, se humedecen y pueden ser foco de mohos.
  • Planifica tus compras: Con una buena lista de la compra, gastarás menos, reducirás el desperdicio alimentario y evitarás que los alimentos se estropeen en la nevera, no hay mayor foco de bacterias que un alimento podrido.
  • Envasa y etiqueta los envases: En la nevera, por lo general, no deberíamos mantener más de 4 días los alimentos frescos, así que una buena idea es etiquetar lo que hemos envasado nosotros, como la comida sobrante.

¿Qué es el FEFO?

Tranquilos todos, que no es un insulto, es una técnica que se llama First Expired, first out. Todo en inglés suena más importante, pero básicamente dice que coloques delante lo que primero caduca para evitar que se quede algo estropeándose al fondo de la nevera.

Como nada es infalible ¿a quién no se le ha derramado líquido o un alimento se ha estropeado? No pasa nada, lo importante es limpiar la nevera cuanto antes. Sí, la nevera, porque sabemos dónde empiezan las bacterias, pero no dónde terminan, así que una limpieza ligera pero eficaz nos dejará más que tranquilos.

Una nevera limpia y ordenada nos permite que sea más eficiente, que gastemos menos energía y que nuestros alimentos (y nosotros) estemos más seguros.