Sí se puede

Cómo ordenar tu maletero a lo Marie Kondo (e irte feliz de puente)

No, no es fácil meterlo todo en el maletero (lo es más si eras buena jugando al Tetris), pero tampoco es imposible. Sigue estos consejos y verás que consigues meter todo dentro. Solo necesitas un poco de maña y orden.

El maletero requiere organizacióniStock

Llegan los puentes: y te vas. Con los churumbeles. Con la familia. Con las amigas. Sola… Da igual, coges el coche y te vas. Y qué ganas de descansar y desaparecer unos días aunque los previos al viaje sean un desenfreno de dejar cosas atadas y bien atadas (léase trabajo) y hacer la maleta en el último minuto.

Bien, eso puede estar bien si eres la mar de ordenada haciendo una maleta, pero si no es el caso, tal vez sería mejor ir organizándola en los días anteriores, buscando los huecos libres que tengas.

Imaginemos que ya tienes hechas las maletas (maletas, bolsos y demás bultos), toca abordar el maletero. Aquí no vale lo suelto como buenamente puedo (que es algo que sueles hacer en tus maletas, que parecen un tótum revolutum). No, en el maletero hay que hilar fino y colocar todos los bultos adecuadamente. Ahí van unas pistas bien útiles:

- Si llevas bolsa de los zapatos, lleva puestos los que más ocupen. Es decir, esas botas estupendas que te resuelven la vida si tienes una cena elegante, pues mejor, puestas que ocupando todo el espacio dentro del bolso.

- Los calcetines, dentro de los zapatos. Y un espacio que te ahorras en la maleta (siempre y cuando los zapatos estén limpios, huelga decirlo).

- Coloca primero lo que más volumen ocupe: la maleta más grande, el carrito del bebé que no puedes dejarte en casa, lo que sea… eso siempre, lo primero y al fondo del maletero. Después, ve organizando el resto de bultos. Piensa siempre en vertical, no sueltes los bultos de cualquier manera.

- Tras encajar lo más pesado, las bolsas más pequeñas podrán ir en los huecos que hayan dejado las maletas más grandes. Un hueco es un tesoro: seguro que puede entrar algo y además así lo dejas todo mucho más encajado.

Llenando el maletero | iStock

- Deja siempre un espacio vacío (tanto en maleta como en maletero) por si vuelves cargada con algo que no te esperabas. Un souvenir, algo de gastronomía local… Nos dejamos llevar por los por si acasos cuando salimos de viaje pero, sé sincera, salvo que te vayas al desierto de Namibia, ¿a que en ese pueblo tendrán farmacia o un pequeño súper donde encontrar lo que necesites?

- Si llevas libros, deja 'El Quijote' en casa: si eres amante de papel, coge los más livianos. Y si no, libro electrónico.

- Para evitar derrames y maletas que se muevan, intenta que los bultos vayan apretados (aprovechando los huecos que te decíamos más arriba). También puedes optar por meter todos los objetos que vayan sueltos en una única bolsa.

- No uses la bandeja del coche para depositar cosas sueltas que pueden herir a los ocupantes en caso de frenada brusca.

- No te relajes a la vuelta: sabemos que pasados los días de descanso, nos relajamos y dejamos la maleta de cualquier forma e intentamos lo mismo en el maletero. Procura mantener el mismo orden.