CONSEJOS DE LIMPIEZA EXPRÉS
Si no tienes tiempo para hacer una limpieza profunda de tu casa antes de que lleguen esos invitados inesperados, en este artículo te damos unos consejos para conseguir una limpieza rápida y efectiva y que tus invitados disfruten de un rato agradable en una estancia acogedora.
"Barre lo que ve la suegra", reza el refrán. Y el saber popular tiene toda la razón. Cualquier persona quiere vivir en un hogar limpio, pero sobre todo, lo que quiere es que su hogar esté limpio, o al menos que lo parezca, cuando vengan visitas.
Por norma general, aunque los invitados sean personas de confianza, queremos que en nuestra casa se sientan cómodos y que reine el buen ambiente en un hogar sin suciedad ni malos olores.
Desde NovaMás queremos ayudarte a conseguir este objetivo, por lo que en este artículo te explicamos qué estancias debes repasar y qué elementos tienes que tener en cuenta para que tu hogar cause la mejor de las sensaciones a los que no viven en ella.
Mantener las estancias ordenadas, sin piezas de ropa en lugares que no tocan; las estanterías con los mínimos trastos posibles y una cocina o un baño con las encimeras y los lavabos recogidos, es un primer paso.
El orden visual es fundamental para transmitir una sensación de limpieza. Puede estar el suelo impecable y las estanterías sin una mota de polvo, pero como haya bolsas, zapatos, prendas de ropa y otra serie de trastos desperdigados por tu hogar, no parecerá una casa limpia.
Antes de una visita, echa un vistazo general a las distintas estancias y guarda en algún armario todo lo que no esté en su lugar.
El buen olor es un síntoma de limpieza. Abre las ventanas y deja que corra el aire por todas las habitaciones, de esta manera renovarás el aire de tu hogar y se irán los malos olores.
Si tienes un ambientador preferido, un aceite esencial o un incienso, es momento de utilizarlo. Aportará este aroma especial que dotará de personalidad a tu hogar.
Si tienes poco tiempo para limpiar tu casa antes de que lleguen tus invitados, pon el foco en las zonas comunes más transitadas. El recibidor, el pasillo y el comedor deben ser tus prioridades.
Pasa rápidamente el aspirador, repasa el polvo de las estanterías y los cuadros, recoloca con gracia los cojines del sofá y despeja el perchero de la entrada para que cuando lleguen tus invitados tengan sitio para dejar sus cosas.
Asegúrate de que el felpudo de la entrada está limpio y, si no te da tiempo de cepillarlo, ¡guárdalo en un armario! Es la primerísima cosa que tus invitados ven antes de entrar en tu casa.
Aunque tus invitados estén poco tiempo en tu casa, seguro que les ofrecerás algo de comer o de beber, por lo que es más que probable que entren en la cocina y en el baño.
Hazte con un desinfectante general y un par de bayetas de microfibra y destínalas cada una a una zona. En el baño repasa el lavabo, los rieles de la mampara de la ducha y el inodoro. En la cocina desinfecta la encimera, el interior del microondas y pásale un paño al pomo del frigorífico.
No te olvides de sacarle brillo a los grifos, de asegurarte que haya jabón y de cambiar las toallas y los trapos de cocina.