AHORRO EN CASA
El frío ya está aquí y tú querrías que hiciese más calor en tu casa y además, con las mismas, bajar el importe de tus facturas. Te decimos cómo hacerlo.
En tu casa se va el calor y lo sabes. Pero no tienes idea de cómo solucionarlo. Tranquilidad, que te vamos a decir qué puedes hacer para evitar fugas de calor y de esta forma también, ahorrar en tus facturas de la compañía energética.
- Vigila las ventanas: es uno de los sitios por donde más calor se escapa. De hecho, por ahí se va entre un 25% y un 30% del calor, cifras que no son baladí. De cara a escoger ventanas, en caso de que estés valorando renovarlas, es mejor que sean batientes, porque estas aperturas son más herméticas que las de la ventana corredera convencional, que suele ser la más habitual. En cuanto a materiales, las de PVC son las que más protegen del frío. Si no quieres poner ventanas nuevas porque la economía no da, que es verdad que este 2020 no anima a dispendios, puedes reforzar tus ventanas poniendo burletes en los marcos (que son muy económicos) y si son ventanas correderas, añade juntas a los perfiles. Un consejo: no escatimes si tienes que comprar ventanas nuevas. Te podrá parecer un gasto importante, pero a la larga, son una inversión.
- La pintura también ayuda a conservar el calor: si tienes que renovarla, elige una térmica. ¿Cómo funciona? Forma una cámara de aire y permite ahorrar hasta un 40% en calefacción. La encontrarás en blanco, que por otro lado, eso que ganas en luminosidad. Pero puedes dar cualquier otro color encima. Las paredes también se pueden aislar con corchos y resinas naturales, que no solo te aislarán del frío exterior sino que además, aislarán acústicamente. Otra solución para las paredes: un zócalo de madera. Por los muros se pierde aproximadamente un 20% del calor. Se ponen sin obras.
- Textiles calentitos: nos referimos sobre todo a los de la cama. Sábanas de franela y por cierto, también las tienes termorreguladoras, de todo hay en el mercado. Si eres de edredón, para temperaturas entre 18 y 24 grados, bastan los de 125 gramos. Si no pones la calefacción por la noche (que es lo idóneo), y eres friolera, te aconsejamos un edredón de 375-400 g/m2.
- Da un toque cálido a tu casa. Por ejemplo, con alfombras: evitarán que se vaya calor por el suelo (si no está bien aislado por ahí se escapa entre un 5% y un 10% del calor, ya ves que se cuela por múltiples sitios diferentes). Tienes alfombras para todos los gustos y de todo tipo de tejidos, pero te aconsejamos, por naturales, las de lana: además, son las más resistentes. En el sofá, que no falte una mantita para ver la tele y si tienes opción, pon una funda al sofá: los modelos elásticos son los más prácticos y se adaptan a cualquier sofá. Y no nos olvidemos de las cortinas: térmicas, gruesas, dobles… serán otro freno a que se vaya el calor. Las térmicas, por ejemplo, reducen las pérdidas de calor hasta en un 25%. Merece la pena.