TRUCOS DE BELLEZA
Te damos las claves para que te duren mucho más tiempo con estos sencillos trucos.
Las extensiones de pestañas es uno de los tratamientos estéticos más demandados en los centros de belleza. ¿Por qué? Esta técnica, desarrollada por primera vez en Corea a principios de los 2000, permite obtener una mirada radiante y fresca durante todo el día, incluso cuando nos acabamos de levantar.
Son una opción excelente para revitalizar los ojos y estilizar su aspecto, pero requieren unos cuidados concretos. Eso sí, es inevitable que tengas que realizar unos retoques para rellenar todas aquellas pestañas que se hayan caído de manera natural. Sin embargo, siguiendo los consejos que compartimos en el vídeo, pueden llegar a durar hasta tres meses.
En primer lugar, el día que acudas al gabinete de estética para ponértelas es conveniente que no maquilles tus ojos ni los mojes con agua durante las primeras 24 horas, ya que el pegamento puede tardar hasta un día en secarse por completo. Es recomendable que te duches antes de ir, para evitar mojarlas hasta el día siguiente en la rutina de higiene diaria.
Presta atención a la hora de desmaquillar tus ojos. Te aconsejamos no usar tu desmaquillante habitual para los párpados con las extensiones. En cambio, usa agua micelar, ya que es mucho menos agresiva para el pelo sintético de las pestañas. Los desmaquillantes suelen estar elaborados a base de aceite que podría facilitar que el adhesivo perdiese sus propiedades.
Evita el uso de la máscara de pestañas. El rímel es un cosmético complicado de eliminar con agua micelar. Además, con las extensiones puestas verás que no te hará falta usarlo para realzar la mirada, es una de las muchas ventajas que tiene este tratamiento estético.
El último consejo es el más sencillo, pero quizá el más importante. A pesar de que es un acto reflejo difícil de evitar, intenta no frotar los ojos demasiado. La fricción elevará la temperatura de las pestañas, debilitando el pegamento y favoreciendo que se despeguen rápidamente.
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