SEGURIDAD ALIMENTARIA
Si no se conservan bien, las infusiones pueden ser foco de pequeños bichos que pueden contaminar el resto de alimentos que guardes en la despensa.
Si te gustan las infusiones, ya debes saber que estas se tienen que guardar muy bien para evitar que se echen a perder. Sin embargo, se puede dar la desagradable situación de que aparezcan bichos. En este artículo te vamos a dar unas pautas para prevenir y otras para eliminar estos insectos inesperados. Además, te explicaremos cuáles pueden ser las causas por las que aparecen.
1. Uno de los puntos importantes es que debes guardar las infusiones en recipientes herméticos, sobre todo si las compras a granel (en este caso, hazlo en tiendas de confianza que sigan los controles de limpieza). Cabe resaltar lo de hermético, ya que si el bote no lo es, es posible que los bichos entren de todos modos. Un recipiente con un buen sellado es lo mejor para evitar los insectos. Ahora bien, asegúrate de que este sellado está en buenas condiciones.
2. Evidentemente, la limpieza es esencial. Antes de meter las infusiones, asegúrate de que el recipiente está como una patena. Lo mejor para limpiarlo es agua con jabón y dejarlo secar o secarlo con un trapo.
3. Una vez elegido el bote, tienes que guardarlo en un lugar fresco y seco y que no le dé la luz solar directamente. Así, los insectos no se reproducirán.
4. Otra opción natural es colocar hojas de laurel en el armario de la cocina o la despensa donde guardas las infusiones y otros alimentos. El laurel desprende un olor que es capaz de repeler a los bichos, tanto las polillas como las cucarachas.
5. De vez en cuando comprueba que las infusiones siguen en buen estado y aprovecha para limpiar también el bote.
Lo primero, y sabe mal decirlo, es tirar las infusiones a la basura. Si ves algún bicho, esa infusión no será segura para tomar. Es posible que el foco de los bichos no sea la infusión, así que mira cuidadosamente el resto de alimentos y si encuentras el causante también tienes que tirarlo.
A continuación, limpia muy bien el recipiente y el armario o despensa con agua caliente y jabón e, incluso después, puedes pasar un paño con un poco de vinagre, ya que tiene propiedades desinfectantes. Sécalo bien antes de volver a utilizar.
En el caso de que la cantidad de insectos sea preocupante o no dejan de aparecer, lo ideal es que contactes con un profesional para que elimine la plaga con total seguridad.