RELACIONES Y CORONAVIRUS

¿Cómo afrontar un encuentro sexual en época de pandemia?

Es normal que ante esta primera vez surjan muchas dudas, pero tener claras las medidas básicas de seguridad y cómo manejarlas en pareja pueden aliviar los nervios.

Sexo con mascarillaiStock

Cumpliste con el confinamiento a rajatabla, aunque te tocaba pasarlo a solas. En la desescalada no has querido desmadrarte y has limitado bastante tu vida social. Pero hay algo que sientes que no puede esperar más. Necesitas volver a activar tu vida sexual. Has encontrado una forma segura de quedar y ahora el miedo está en cómo afrontar, tras varios meses, ese primer encuentro sexual. Sobre todo, teniendo en cuenta que la pandemia no es, ni mucho menos, algo del pasado.

¿Es normal estar algo paranoica? ¿Quizás deberías cancelarlo? ¿Lo puedes afrontar de forma segura? Si cuando tienes una cita, y sabes que es posible que haya sexo, ya te asaltan muchas dudas, ahora la situación hace inevitable ser un manojo de nervios. No eres la única.

“Es natural que nuestra mente y nuestro cuerpo tenga miedo a ese primer encuentro sexual y lo manifieste”, tranquiliza en primer lugar la coach Raquel Gargallo. “Tener dudas es lo más sabio porque, a partir de ahí, hay que buscar buena información, tener sentido común, cuidarse y disfrutar”.

La gestión de estas emociones depende mucho de cuál sea la situación. Puede que la cita sea con una pareja a distancia con la que llevas mucho sin verte, puede que sea con alguien que acabas de conocer y sea la primera vez que vais a intimar, o incluso puede que sea una segunda oportunidad con una ex pareja con la que has retomado el contacto estos meses.

Sea como sea, para sentirte tranquila, es importante seguir cierto protocolo que aunque pueda parecer que corta el rollo, nos dará una mayor tranquilidad y seguridad, para que los nervios no asalten después en un peor momento.

“La comunicación es importantísima, ya sea con pareja estable o no, es igual de importante. Lo primero que tenemos que tener claro es que sí o sí es imprescindible que hablemos de ello”, insiste la experta.

Según Gargallo, no es necesario que se trate de un cuestionario aséptico, sino de una charla tranquila, o incluso seductora, sobre qué hemos estado haciendo estos meses previos, para valorar un poco los comportamientos de riesgo de esa persona. También para saber qué opina de la situación, un tema que saldrá casi seguro, y sobre la necesidad de seguir las medidas de higiene. Sus respuestas nos dejarán más tranquilas para dar el siguiente paso, o quizás nos hagan replantearnos esa cita.

Si la cosa ha ido bien, hay ciertas cosas que debemos tener en cuenta. El primer paso hacia el sexo siempre ha sido un beso. Ahora precisamente los besos son lo que está prohibido, así que no estará de más innovar con un gesto sexy como entrelazar las manos (que nos habremos lavado), una caricia en el muslo, o una mirada provocadora, lo único que no puede tapar la mascarilla.

De hecho, otro de los hándicaps es que tendremos que dejar la mascarilla puesta durante toda la relación, ya que el contacto será estrecho. Pero es cuestión de verlo como un juego. “Busquemos que la mascarilla no sea vista como algo que se ha impuesto en nuestro día a día, utilicemos una mascarilla apropiada pero convirtámosla en parte del juego, que sea un complemento de morbo…”. Si en algún momento hemos jugado a ponernos un antifaz solo por jugar, ¿no podría ser esto algo parecido?

Luego queda la cuestión del dónde. Antes, si la cita iba bien y la cosa surgía de forma improvisada podíamos darnos un homenaje en la parte de atrás del coche o en un baño público. Ahora quizás sea mejor buscar una casa, un hotel por horas o cualquier lugar donde podamos lavarnos las manos y darnos una ducha. “Es importante tener en cuenta que hay que seguir unas medidas higiénicas adecuadas, ahora sería ideal ducha antes y después”.

Sexo y pandemia | iStock

De nuevo, consiste en ver este momento como un instante de relax, de encontrar un lugar en el que sentirnos a gusto o incluso asegurarnos que no nos vamos a encontrar con sorpresas u olores que muchas veces también nos han cortado el rollo. Ver las ventajas y no los inconvenientes. “Para los que piensen que ‘el aquí te pillo aquí te mato’ se pierde, nada más lejos de la realidad, porque mantener el morbo hasta encontrar un lugar puede servir para encenderse aún más”, añade la coach.

Teniendo esto claro y estando ya en faena, nos queda la duda de qué hacer o qué no hacer para sentirnos más seguras. La penetración mejor si es en una postura que no sea cara a cara y siempre con preservativo. La masturbación al otro, lo mismo, podemos hacerlo ambos tumbados, pero mejor sin estar frente a frente. Y el sexo oral, quizás, mejor para otra ocasión.

“Lo idea es optar por otras técnicas, juegos, o partes del cuerpo, penetración, caricias, masturbación, masaje, juguetes eróticos… tenemos muchísimas alternativas para seguir disfrutando. No te quedes enfrascada en lo que no puedes hacer, veamos que sí podemos hacer y cómo hacerlo”, concluye Gargallo.

Por último, solo queda tener en cuenta que esto solo es un primer encuentro sexual. Es normal que, con o sin pandemia, no todo salga redondo. Solo es cuestión de tomárselo con humor, entender que es una primera vez para romper el hielo y que, si nos apetece, siempre puede haber una segunda vez para mejorar la experiencia.