TRUCO
Las pelotillas que se generan en el colchón no quedan especialmente bien, pero hay una forma de retirarlas y dejar tu colchón como nuevo.
Quien más o quien menos se mueve por la noche mientras duerme, y aunque esto parezca un movimiento inocente y sin ninguna repercusión, lo cierto es que el colchón lo sufre y le acaba pasando factura. La fricción de las sábanas con el cuerpo mientras se duerme terminan formando unas pequeñas bolas de tela que se quedan adheridas al colchón. Puede parecer una tontería, pero quitarlas con la mano es complicado y hay que dedicarle tiempo.
Existe una forma de que estas pelotillas se separen del colchón fácilmente y solo es necesario una herramienta que casi todos los hogares tienen. Los rodillos quitapelusas se quedan en poco, no consiguen agarran con la fuerza necesaria para poder separarlas, ya que los hilos que han hecho que se unan al colchón son flexibles y acaban no haciendo efecto. Es por eso que la clave reside en poder cortar esos filamentos que unen a ambos, y la mejor forma de hacerlo es con una cuchilla de afeitar.
El movimiento que hay que realizar es lo más básico que hay, consiste en pasar la cuchilla en horizontal por la zona donde se encuentran las pelusas. Es recomendable hacer pasadas de poco en poco para que no se hagan nudos entre distintas bolas y se complique la labor. Tras unas pocas pasadas el resultado es visible y la zona se queda libre de pelusas.
Una estrategia para intentar retrasar la aparición de estas molestas bolas es darle la vuelta al colchón. Es recomendable hacer este movimiento una o dos veces al año, de forma que este estará mejor cuidado y durará más tiempo con una buena calidad.