TRUCOS FÁCILES
Una casa puede ser fuente de acumulación de bacterias, polvo e incluso ácaros. Es por ello que es muy importante mantenerla limpia de forma regular, y estos con algunos consejos para evitar que los ácaros se acumulen en tu vivienda sin darte cuenta.
Mantener una casa limpia y libre de ácaros no es tarea fácil. ¿O sí? Los ácaros son artrópodos muy pequeños, que no se ven a simple vista y que son inofensivos. Sin embargo, los que se encuentran en el polvo son muy comunes, además de los causantes de alergias respiratorias.
Para evitar al máximo que los ácaros se queden a vivir en tu hogar como un individuo más, ocasionando asma, alergia y picores, hay una serie de trucos muy sencillos a seguir.
Antes de saber cómo atacarlos y evitarlos, hay que conocer cómo actúan. En primer lugar, suelen crecer en ambientes calientes y húmedos. Además, se alimentan de residuos orgánicos, por lo que su vivienda favorita está entre los colchones, las alfombras y las almohadas.
Un truco a seguir es cambiar las sábanas frecuentemente, al menos una vez a la semana. Tras esto, es recomendable lavarlas a 60 grados. Lo ideal es utilizar protectores de colchón anti ácaros y almohadas preferiblemente con relleno de materiales sintéticos.
También hay que prestar atención a las alfombras, las cuales deben limpiarse con vapor. La alta temperatura acabará con los ácaros. Y, para evitar aún más a estos individuos, es recomendable no tener muchos peluches y, si los tienes, lavarlos con frecuencia.
De igual forma, hay que aspirar de forma regular todas las superficies y ventilar la casa cada día. Las mascotas también son fuentes de ácaros, por lo que es recomendable limpiarlas cada cierto tiempo.
Y, por último, es importante cambiar con regularidad los filtros del aire acondicionado y de la calefacción, así como evitar el uso de humidificadores y la humedad en general.