SIN MICROORGANISMOS

Bayetas, encimera, alimentos crudos... así debes limpiar la cocina para evitar infecciones

Estamos rodeados de microorganismos. Es mejor asumirlo cuanto antes, y no pasa nada. Eso sí, a algunos debemos mantenerlos controlados. Si no tenemos una correcta higiene en casa, aumentaremos la posibilidad de una intoxicación alimentaria.

Si la inocuidad de los alimentos debe estar garantizada en todos los eslabones de la cadena alimentaria, tenemos que mantenerla también en nuestra casa.

Casi la mitad de las intoxicaciones alimentarias se dan en el entorno del hogar. Y algunas hasta las llevamos nosotros mismos.

En nuestras manos llevamos todo tipo de microorganismos y gérmenes. No os digo nada cuando no nos hemos lavado las manos después de ir al baño, manipular dinero, tocar a nuestras mascotas o manipular alimentos crudos. El lavado (correcto) de manos es imprescindible para poner la primera barrera frente a patógenos como la E. coli.

Contaminación alimentaria con alimentos crudos

Los alimentos crudos que expongamos a superficies pueden tener diferente carga de microorganismos como Salmonella, Listeria o Campylobacter que serán eliminados con el cocinado, pero si no limpiamos las superficies por las que han pasado, estaremos contaminando todo lo que pase por allí después. Esto también es aplicable a utensilios, paños y bayetas.

¿Cada cuánto hay que lavar las bayetas?

Deben limpiarse con agua caliente y detergente y después desinfectarse con lejía con agua fría. Las bayetas, estropajos, trapos de cocina, se deben lavar con agua caliente al menos una vez a la semana, es así como evitaremos que las bacterias formen biofilms, los responsables de que esté gelatinosa.

¿Por qué las bayetas se quedan babosas?

Cuando hay una mala higiene de las bayetas aparecen los biofilms, que son estructuras que forman las bacterias para sobrevivir. Una vez se instalan, es mejor tirar la bayeta que intentar quitarlas, así que lo importante es evitar que aparezcan, y eso no lo hace la lejía, sino el calor.

Cómo y cuándo lavar bien las frutas y verduras

En el caso de alimentos que se consumen sin cocinar, debemos saber que no hay una barrera posterior que elimine los microorganismos, como sería el cocinado. En ese caso, las zonas en las que han estado en contacto como la nevera, frutero… se deben limpiar.

Eso sí, no se lavan las frutas antes de meterlas en la nevera, sino antes de consumirlas o cocinar. Si lo lavamos antes, estaremos eliminando la capa de protección que tiene de forma natural y se estropeará antes.

El orden e higiene en la nevera, evitará la posible contaminación de unos alimentos a otros.

Cómo descongelar bien

Las bacterias que causan intoxicación alimentaria se multiplican rápidamente entre los 20-50 grados, no se lo pongamos fácil descongelando a temperatura ambiente.

El congelador no destruye los gérmenes nocivos, pero conserva los alimentos hasta que pueda cocinarlos.

Listeria, Campylobacter, E.coli, Salmonella… estos patógenos están esperando a que te despistes para multiplicarse en tu cuerpo. Y si no acabamos con ellos en el cocinado, que también forma parte de la inocuidad de alimentos, no tendrán miramientos.

Consejos para evitar contaminaciones en casa y acabar en el hospital

1. Los alimentos se cocinan de manera segura cuando la temperatura interior es lo suficientemente alta como para matar microorganismos que pueden provocar una intoxicación alimentaria.

2. No mantener la comida caliente fuera de la nevera más de dos horas en verano y una en invierno.

3. Y, por último, pero no menos importante: la compra. Si mantienes una perfecta higiene en tu cocina, pero lo que traes de fuera no tiene garantías, de poco servirá lo limpia que tengas la cocina.

Compra siempre los alimentos en establecimientos con registro sanitario y garantías de seguridad. Por ejemplo: no compremos el marisco al conocido del dueño del bar donde vas a tomar el café. Serán muy ricos, pero seguramente carezcan de garantías sanitarias.