Surgen mil dudas

Alimentación y embarazo: ¿qué puedes y qué no puedes comer?

Entre las inquietudes más habituales están las de la alimentación. Es lógico. Si ya de forma habitual escuchamos opiniones diferentes en cuanto a la comida, en estos casos es todavía más complicado encontrar información correcta. Intentaremos aclarar algunas dudas.

Embarazo y alimentacióniStock

¿Por qué hay que tener precaución con la alimentación?

El sistema inmunitario de una mujer embarazada puede estar ligeramente debilitado (el cuerpo está ocupado en cosas más importantes) y una intoxicación de origen alimentario en la que en otro momento no iría más allá, en el embarazo puede suponer necesitar mayor atención. Por otro lado (el que en el fondo les preocupa a las madres), el feto puede verse afectado por algunas bacterias o parásitos como la Listeria, E. coli o Toxoplasma.

Para empezar, desde la industria alimentaria se realiza un gran esfuerzo para facilitar productos seguros, pero, una vez llegan a nuestra casa, debemos mantenerlo. Las buenas prácticas de manipulación se podrían resumir en:

- Correcto lavado de manos después de ir al baño, antes y después de manipular alimentos, sobre todo crudos. No es necesario utilizar geles hidroalcohólicos, las bacterias no se agarran a las manos. Es suficiente utilizar agua caliente y jabón. Estos geles sólo son útiles si no es posible encontrar agua.

- En la nevera, los alimentos crudos deben estar separados de los cocinados. Además, deben permanecer el menor tiempo posible y estar correctamente envasados. No se recomienda consumir sobras de comida frías.

- Cualquier alimento que necesite refrigeración debe guardarse en la nevera y mantenerlo allí. Nunca habría que descongelar a temperatura ambiente.

- La correcta limpieza de superficies es básica pero no lo limitemos a eso, trapos, estropajos o bayetas deben cambiarse y lavarse a más de 60ºC.

- Hay que lavar las frutas y hortalizas crudas. No es necesario dejar en remojo, lo importante es dedicarle tiempo, frotarlo bien. A veces dicen que con un poquito de lejía o productos específicos desinfectantes se garantiza más la seguridad. La verdad es que frotando bien es suficiente salvo en productos que llegan directamente del campo. No obstante, si las futuras mamás se quedan más tranquilas, la proporción sería una cucharadita de café (2ml) por litro, dejar en remojo 10 minutos y aclarar bien con agua corriente.

- Para cocinar en el horno o microondas, comprueba la temperatura de cocinado al final, debería llegar a 70ºC en el centro del producto. Un termómetro de cocina será útil para estas ocasiones.

Una vez tenemos esto claro, vamos con los alimentos con los que debemos tener precaución:

Embarazada comiendo | iStock

- Nada de alcohol, nada. Ni 0.0%. La cantidad de alcohol es irrisoria en este caso, pero los estudios dicen que no hay cantidad segura de alcohol. Son 9 meses, no hay motivo para jugársela. Exactamente igual con las bebidas energéticas.

- No se recomienda consumir huevo crudo ni preparados elaborados con él (ni mayonesa, tiramisú o ponche de huevo).

- La carne cruda o poco hecha debería evitarse.

- El pescado crudo está de moda, sushi, sashimi, ceviche, carpaccios… pues hay que olvidarse de esa moda durante el embarazo.

- Ya sabemos que la carne procesada debe tener un consumo esporádico, pero es que, además, en el embarazo no habría que consumir productos cárnicos crudos (menos aún si el médico confirma que no hay inmunización frente a toxoplasmosis). Si el antojo es inevitable es posible congelar y cocinar, pero ¿de verdad es inevitable?

- No hay que consumir en ningún caso leche cruda ni quesos elaborador a partir de leche cruda. En los quesos de pasta blanda, queso azul o mozzarella debe especificar que se han pasteurizado, en otro caso, la recomendación es no consumir.

- Patés refrigerados, pescados marinados, ahumados (salvo enlatados) o marisco crudo quedarán fuera de la lista de alimentos permitidos.

- Es recomendable evitar el consumo de pescados grandes como pez espada o atún.

- Los zumos no sustituyen a la fruta. Aumentar el consumo de fibra será necesario en esta época así que las tres piezas de fruta mínimo son fundamentales.

Seguridad alimentaria, alimentos a evitar... faltan cuatro mitos que es necesario desterrar.

- Es falso que haya que comer por dos. Hay que comer bien. Ya está.

- No es necesario el suplemento de vitaminas salvo expresa recomendación del médico. Son caros, si se sigue una correcta alimentación y no hay ningún problema durante el embarazo, no hay motivo para tomarlos.

- No hay una cantidad mínima de agua, pero sí es importante mantener la hidratación.

- Nunca hay que utilizar “remedios naturales”, no sabemos el efecto que pueden tener y no son seguros. Para cualquier duda, existe un equipo de sanitarios especializados que resolverán cualquier inquietud.