Cada vez más numerosas
De repente, días antes de que llueva, tú empiezas a toser, a notar que te ahogas, y no sabes por qué. Si hay niebla, para ti es un infierno. Cansada de esta situación, de la que tardas en darte cuenta, decides ir a un especialista.
Resultado: tienes alergia a una espora de la humedad. Toca vacunarse. Y así, sin más, surge una alergia que desconocías pero de la que tu cuerpo te estaba dando señales y no has sabido escuchar.
Hablamos con la doctora Belén Hinojosa Jara, especialista en Alergología en Médica Belén Hinojosa Jara, facultativa especialista del Área de Alergología en el Centro de Especialidades Virgen de la Cinta de Huelva y miembro de Top Doctors.
Síntomas de alergias que pasamos por alto
“Los más importantes son el picor de ojos, los estornudos, la congestión nasal, el agüilla que sale por la nariz, que se confunden con los síntomas de un catarro, por ejemplo. Lo que más indica una alergia son los estornudos y los picores en el velo del paladar”, nos cuenta la doctora.
Las alergias más raras o diferentes
“Entre los casos clínicos más sorprendentes destacaría la alergia a una higuana; las alergias alimentarias, a medicamentos ya casi son habituales… pero el más curioso que hemos visto es a una mascota”, explica.
Cómo podemos saber que un alimento nos sienta mal pero pensamos que es normal
“Hay que diferenciar muy bien lo que es una intolerancia y una alergia. El primero puede ser porque nos falte una enzima intestinal, por ejemplo; como ocurre con el caso de la lactosa, o el gluten… Tenemos digestiones pesadas, o diarreas… Las alergias alimentarias son cada vez más frecuentes y los síntomas son inmediatos. Incluso en ocasiones lo que provocan es un síntoma cutáneo, son inmediatos, agudos y requieren un tratamiento más inmediato. Las intolerancias son de desarrollo más pausado”, añade.
En qué debemos fijarnos para tomar medidas ante una posible alergia
“Un paciente lo que debe hacer, lo primero, es ir al alergólogo, para saber a qué se es alérgico. Luego ponerse un tratamiento, inmunoterapia, para que el tratamiento no vaya a más, para que cure la enfermedad”, resalta, porque no vale con poner medidas rápidas e inmediatas, hay que evitar que vuelva a surgir la alergia.
Alergia al aire contaminado
¿Se puede tener alergia al aire contaminado? “No, alergia en sí no, pero sí puede exacerbar unos síntomas de un paciente alérgico. El aire contaminado no produce un mecanismo inmunológico de alergia. Pero un paciente alérgico expuesto a contaminación, sí se agrava la situación, por ejemplo de pacientes asmáticos”, resalta. Y es que si vas a urgencias los días de alerta por contaminación verás a niños y mayores con aerosoles intentado respirar sin ahogarse.
Alergias a tóxicos, perfumes, cosméticos, ¡y al tinte!
Imagina que cada vez que vas a la peluquería a teñirte, la cabeza te pica a rabiar. Cambias de centro, de tinte, de todo… y da lo mismo. Te salen ronchas, y piensa que es normal. Ese picor que no se va, pero piensas que es así. Incluso sin teñirte, cuando te peinan, te pasa. Y tras años de aguantarte, decides ir al alergólogo. Tienes alergia a los tintes químicos, a todos vaya. ¿Tu solución? Henna natural, la tierra que colora, y que es mucho más incómodo de aplicarse, cierto, pero no te pica ni te sale ninguna rojez. Eso sí, te tocará a partir de ahora tener una peluquería de referencia, porque los cepillos que hayan estado en contacto con tinte también te darán alergia, y hay muchos centros que aún no se creen este tipo de reacción. Paciencia, ánimo y un buen centro de confianza salvarán tus canas.
“Se pueden tener problemas con muchos productos. Lo que ha cambiado es que tenemos mejores diagnósticos. La alergia ha ido aumentando desde a tintes de pelo, dermatitis por contacto con fragancias, que pueden llegar a producir reacciones a lo largo del día incluso. Pero realmente lo que ha cambiado es sobre todo el estilo de vida y el tener unos medios que nos permiten llegar más a los diagnósticos que antes no llegábamos”, finaliza la doctora.
Así que ya sabes, escucha a tu cuerpo, mira las respuestas que te da ante determinadas circunstancias, y consulta realmente a tu alergólogo, porque las reacciones externas son fáciles de ver, pero las internas, pueden costarte la vida.