4 consejos básicos de Feng Shui para tu casa

Cuando amueblas una vivienda te paras a pensar en toda clase de detalles estéticos: si los muebles van a aportar luz, si van a combinar unos con otros o si los aburriremos rápidamente. Pero según la tradición china, también deberías tener en cuenta que los muebles pueden aportar equilibrio y energía positiva a tu vida según cómo los coloques, lo que se conoce como Feng Shui.

Existen interioristas profesionales que pueden ayudarte a que tu casa tenga la armonía perfecta para que tú y los tuyos tengáis salud y prosperidad. Pero si quieres empezar por algo más básico, en este artículo te contamos 4 tips fáciles para comenzar a aplicar esta filosofía en tu hogar.

Cuelga los espejos

Según el Feng Shui, los espejos (y también los cuadros) deben ir colgados y nunca apoyados entre el suelo y la pared, como vemos en las casas de varias influencers. Que las tendencias no arruinen la armonía de tu casa.

En cuanto espejos, también es importante saber que no se deben colgar juntos en un mismo sitio, tampoco frente a una puerta o ventana. Para tener un buen descanso, no debes colocar un espejo frente la cama.

Por último, intenta que todo el espacio que se refleje en el espejo esté ordenado, ya que si tienes todo patas arriba, al reflejarse será el doble de caótico y causará estrés a tu mente.

Coloca el cabecero grande en una pared sin ventanas

Esta filosofía oriental recomienda que todas las camas tengan cabeceros y, a poder ser, grandes -como mínimo que abarquen el ancho total de la cama-. En cuanto a material, idealmente deberían ser de madera o tapizados. De esta forma te aportará protección y te facilitará el descanso.

Otro punto importante que debes saber es que el cabecero -o, en su defecto, la cabeza de la cama- no debe estar bajo una venta o entre dos ventanas. Y, si es posible, debe situarse en la pared más alejada de la puerta.

Cuida los colores y los elementos de cada estancia

Otro consejo basado en la filosofía Feng Shui es no abusar de un color en una misma estancia. Es decir, si tu salón tiene las paredes de color blanco roto, evita que los muebles y el sofá sean del mismo tono.

Tampoco se recomienda sobrecargar con objetos, por ejemplo, poner cojines en abundancia encima de la cama.

Ten un espacio de trabajo con vistas

Con esto no nos referimos a que tengas un escritorio en frente de un ventanal que dé al mar o a un valle, sino que tengas un espacio mínimamente amplio frente a ti. Con esto queremos decir en que no debes poner tu mesa de trabajo de cara la pared, necesitas espacios abiertos para que tu mente sea creativa.

Por último, para trabajar con más energía y rendir mucho más, ten a la vista un papel con tus metas y motivaciones o una imagen que te inspire.