¡CUÍDALOS!
Aunque los zapatos de terciopelo son un gran complemento para cualquier look, resulta algo complicado de limpiar, por lo que es importante que sigas paso a paso lo que te contamos a continuación para evitar estropearlos.
¿Usas con frecuencia zapatos de terciopelo, pero no sabes cómo limpiarlos? Son una opción perfecta para llevarlos puestos durante cualquier festividad e incluso en el día a día. Sin embargo, son muy delicados y se estropean con más facilidad. Además, acumulan demasiado polvo y en ningún caso deben mojarse ni que les de la luz directa durante demasiado tiempo, ya que el terciopelo tiende a estropearse. A continuación, te explicamos cómo limpiar este tipo de zapatos y cuál es la mejor manera de conservarlos.
Cómo limpiar los zapatos de terciopelo
Para ello, solamente necesitarás tres elementos que seguro que tienes en casa: un cepillo, una botella de agua y un detergente. Primero coge el cepillo de cerdas suave y pásalo en la misma dirección que el tejido para eliminar el polvo y otros restos de suciedad. Una vez que consigas quitar toda la suciedad, coge una botella de agua, llénala de agua templada y añade una cucharada de detergente.
Posteriormente, ciérrala y agítala bien hasta que se forme una espuma. Para limpiar el terciopelo debes aplicar la espuma en el cepillo y frotar con cuidado sin hacer demasiada fuerza. Eso sí, no deben mojarse para no estropear el terciopelo.
Una vez que acabes de frotar la espuma, debes dejarlo secar. En ningún caso hagas uso del secador, ya que el calor daña el tejido, por lo que aplicarlo de forma directa es una mala idea. Por esta razón, déjalo durante un par de horas en un espacio seco donde no le pueda dar la luz directa y ya tendrás tus zapatos de terciopelo como si estuviesen recién comprados.
Cada vez que se ensucien realiza este mismo proceso para cuidarlos y así evitar su deterioro. Además, cada vez que te los pongas intenta cepillarlos para quitarles el polvo y guardarlos siempre en una bolsa para evitar que cojan polvo o humedad y poder disfrutar de tus zapatos de terciopelo todas las veces que quieras.