HARTA DE LAS CRÍTICAS

Violeta Mangriñán enseña sus orejas y responde contundente a las críticas que ha recibido por ellas: "Basta ya"

Una vez más, Violeta Mangriñán ha utilizado sus redes sociales para responder al odio que ha recibido por un vídeo que ha compartido. En esta ocasión, el motivo han sido sus orejas, pero la influencer ha decidido no pasarlo por alto.

Violeta Mangriñán en el Festival de MálagaGtres

Violeta Mangriñan lleva en las redes sociales muchos años y algo que se ha convertido en su sello personal es la naturalidad con la que trata todos los asuntos de su vida. Además, es habitual que responda tanto a los buenos comentarios como a las críticas, ya que detrás de la pantalla se encuentra una persona de carne y hueso.

Algunos de los temas a los que da visibilidad se encuentra la realidad detrás del embarazo, el post parto, la maternidad o los problemas de salud que han pasado tanto ella como sus hijas. De la misma forma que, en esta ocasión, ha hablado con total naturalidad de sus orejas.

Violeta Mangriñán Instagram | Instagram

Antes de contestar a las críticas, la influencer ha subido unos stories con el pelo semirecogido publicitando algunos productos de maquillaje. Lo que no se esperaba es que fuera a recibir comentarios sobre sus orejas; comentarios destructivos que han apuntado a que las tiene de soplillo o muy grandes.

Violeta ha abordado el tema publicando otra storie en Instagram mostrando sus orejas desde todos los ángulos, con el pelo recogido con las manos para que se vieran mejor, y con el pelo suelto y poniéndoselo detrás de las orejas. Un vídeo que ha acompañado de un texto donde ha querido desahogarse. "A mis orejas no les pasa absolutamente nada... Cuando me pongo el pelo por atrás de la oreja, tengo tanta cantidad que el peso del pelo las empuja hacia delante... Aunque mis orejas fuesen de soplillo, que no es el caso, eso no le daría derecho a nadie a burlarse", ha explicado.

Violeta Mangriñán Instagram | Instagram

Además, se ha quejado de que las redes sociales cada vez son más tóxicas y que tendría que solucionarse este problema. Y es que, al compartir contenido sobre la realidad de su día a día y sobre algunos aspectos de su vida que no son tan bonitos como de costumbre, está expuesta en mayor medida a las críticas: "Basta ya".