EN 'EL HORMIGUERO'

Tamara Falcó, sobre su "maravillosa" prueba de novia tras confirmar que ya tiene vestido: "Me he sentido súper escuchada"

Tamara Falcó ha confirmado en 'El Hormiguero' que ya tiene al fin vestido de novia. La colaboradora del programa ha confirmando que va a lucir un Carolina Herrera el gran día de su boda con Íñigo Onieva y ha explicado que aún tiene pendiente unas "tres o cuatro" viajes a Nueva York para concretar los detalles. El momento, ¡en este vídeo!

"Tenemos vestido", con estas dos palabras ha comenzado Tamara Falcó su intervención en 'El Hormiguero' esta noche, confirmando que va a lucir un Carolina Herrera el día más importante de su vida. Después de la semana tan frenética que ha tenido viajando a Nueva York y después a Ibiza, la marquesa de Griñón se ha sentado en su programa y ha despejado todas las dudas.

La hija de Isabel Preysler ha confesado que fue ella misma quien se puso en contacto con Wes Gordon y le dijo "he tenido un problemilla" y ha asegurado que su encuentro en Nueva York como "la prueba de novia más maravillosa que ha tenido", y es que "me he sentido súper escuchada".

"Tengo que ir a hacerme más pruebas", anunciaba, porque no está todo terminado, de hecho tiene pendiente "tres o cuatro" viajes para concretar todos los detalles para su vestido de novia. "Fue fenomenal", desvelaba y entre risas, aseguraba "por lo menos tengo algo que ponerme" el día de su boda, tal y como puedes ver en el vídeo que acompaña a la noticia.

Sin más, Tamara no ha querido entrar en más detalles sobre cómo se decantó por Carolina Herrera, tampoco ha desmentido algunas informaciones que apuntan a que ella ya tenía negociaciones hechas con la firma antes deromper su relación laboral con la anterior firma.

La prometida de Íñigo Onieva sí que ha querido recalcar, no sabemos si a modo indirecta para las anteriores modistas, que en esta reunión con el equipo de Wes Gordon ha sido espectacular porque ha sido escuchada y se ha sentido como en casa. De esta manera, parece que Tamara ya puede dormir tranquila por las noches porque su vestido de novia va viento en popa.