COMPLICIDAD
Hoy es un día muy especial para la princesa Leonor, que ha contado con el apoyo incondicional de los Reyes y la infanta Sofía en su jura de la Constitución. Una jornada histórica en la que Letizia y Felipe VI han dejado a un lado su faceta constitucional para mostrar su lado más cariñoso y familiar.
La princesa Leonor nació siendo la segunda en la línea de sucesión al trono. Algo que cambió el 19 de junio de 2014, cuando Felipe VI fue proclamado Rey tras la abdicación de Juan Carlos I y, por ende, su hija mayor pasó a ser Princesa de Asturias.
Hoy, 31 de octubre, Leonor está un paso más cerca del trono. Y, con motivo de su mayoría de edad, ha jurado la Constitución ante las Cortes Generales. Un día histórico en el que Letizia y Felipe han dejado a un lado su papel como Reyes de España para mostrarse como padres.
En cada acto constitucional, es muy notable la complicidad entre Felipe VI y la heredera, así como la atención que la Reina muestra hacia su hija mayor. Y en esta ocasión así ha sido.
Han sido varios los momentos en los que los Reyes han dejado ver su faceta más cercana y familiar. En primer lugar, durante la foto de los cuatro a la entrada del Congreso de los Diputados, Letizia no ha dudado en colocarle la coleta a la princesa Leonor.
De igual forma, cuando la Princesa ha recibido las medallas del Congreso de los Diputados y del Senado, Felipe VI ha querido colocarle la coleta y acomodarle la cuerda de las medallas con una sonrisa y mucho cariño.
Pero el momento más cariñoso ha llegado después de jurar la Constitución. La Princesa de Asturias ha jurado desempeñar fielmente sus funciones, guardar y hacer guardar la Constitución y las leyes, respetar los derechos de los ciudadanos y las comunidades autónomas y guardar fidelidad al Rey.
Tras esto, una vez concluida la jura, los Reyes han roto la solemnidad del acto para acercarse a la Princesa y darle dos besos, además de varias muestras de afecto y cariño. Asimismo, la infanta Sofía ha acariciado el brazo de su hermana en señal de orgullo.
Otro detalle que no ha pasado desapercibido ha sido el gesto que han tenido los Reyes con sus dos hijas durante el desfile hasta el Congreso. Los cuatro han llegado en un Rolls Royce Phantom IV, en uno la princesa Leonor y la infanta Sofía; en el otro la reina Letizia y Felipe VI. Pero el detalle que han tenido es que el coche de los Reyes tenía los cristales tintados, mientras que el de sus hijas tenían los cristales normales. De esta forma, han dejado todo el protagonismo a la Princesa y a la Infanta en un día tan especial.