EN ÁMSTERDAM
La reina Letizia ha tomado medidas que no habíamos visto antes como consecuencia de su neuroma de Morton que sufre en el pie izquierdo y una metatarsalgia crónica en ambos. La Reina ha tenido que sentarse para el besamanos en la cena de gala en Ámsterdam.
Si hay una imagen que ha impactado de la visita de Estado que los Reyes, don Felipe y doña Letizia, están llevando a cabo en los Países Bajos ha sido la que ha protagonizado la Reina en el besamanos en la cena de gala en el Palacio de Ámsterdam este martes por la tarde.
Un acto donde ha llamado mucho la atención la actitud de la reina Letizia, que ha presidido sentada el besamanos, una imagen que ha llamado y todo tiene un porqué. Se debe al neuroma de Morton que sufre en el pie izquierdo y una metatarsalgia crónica en ambos, algo que se le ha agudizado durante esta visita de Estado y que le ha obligado a sentarse.
El diagnóstico se lo dieron hace dos años y en octubre del año pasado fue cuando se conoció que la Monarca sufría estas inflamaciones y desde entonces se ha visto cómo la Reina intenta adaptar su calzado para cada ocasión, pero nunca se le había visto sentada debido a estas dolencias.
No obstante, la reina Letizia no ha querido abandonar sus compromisos laborales en esta visita de Estado para continuar estrechando y fortaleciendo las relaciones bilaterales entre ambos países.