Nick Carter, integrante de los Backstreet Boys, ha sido acusado de violación. A través de una larga y detallada publicación en su blog personal, la cantante estadounidense, Melissa Schuman, miebro del grupo Dream, ha narrado lo que vivió cuando tenía 18 años y Nick 22. “Voy a compartir algo que quise fingir que nunca sucedió desde que tenía 18 años”, comienza diciendo, y sigue: “Una carga que pensé que tendría que llevar durante el resto de mi vida y que sufrir en silencio". Y es que según ella misma relata, el cantante, por medio de sus representantes, mostró interés por ella y la llegó a llamar por teléfono, pero no fue hasta tiempo después cuando coincidieron en una película para televisión. Asegura que él era “amable y carismático”, y que llegó el día en el que la invitó a pasarse por su apartamento en Santa Mónica. Según cuenta Schuman, comenzaron a besarse y ella no quería llegar más lejos porque por convicciones religiosas era virgen y pretendía serlo hasta que se casara. Pese a ello, Carter no paró, le desabrochó los pantalones y le practicó sexo oral. Después le pidió a ella que le practicara una felación, a lo que se negó y Nick se enfadó, hasta que ella accedió por el miedo de estar ante un hombre más grande y más fuerte. Según el relato de Melissa, posteriormente él la llevó a su cama, se tumbó sobre ella y la violó, pese a las reiteradas ocasiones en las que ella le dijo que no quería practicar sexo ya que quería que su primera vez fuera con su marido, a lo que él le susurró: “Yo podría ser tu esposo”. Después de lo sucedido, quiso denunciar y lo habló con su mánager, pero finalmente decidieron no seguir adelante por cuestiones de dinero y medios, ya que en ese momento Nick contaba con el mejor abogado del país. Una vez la noticia ha saltado a los medios, han sido muchos los que han tratado de ponerse en contacto con el músico sin éxito. Por el momento, no ha respondido a las acusaciones que llegan en un momento en el que la polémica en torno a las agresiones sexuales en Estados Unidos en el mundo de la música, el cine o la política están en su máximo apogeo.