TIC, TAC...
Tic, tac… Comienza la cuenta atrás para una de las bodas del año: la de Víctor Elías y Ana Guerra. Serán muchos los rostros conocidos que asistan, entre ellos Natalia Sánchez, quien ha confesado en el Festival de Vitoria que aún no tiene vestido para el enlace.
Después de unas vacaciones familiares junto a Marc Clotet y sus hijos, Natalia Sánchez ha vuelto al trabajo. Y lo ha hecho presentando su nueva serie, Regreso a las Sabinas, en el Festival de Vitoria. Pero, más allá del terreno profesional, su mirada está puesta en la gran boda del año, la de Ana Guerra y Víctor Elías.
Será el próximo 31 de octubre cuando pronuncien el sí, quiero en la finca Prados Moros, situada en la Sierra de Guadarrama. Un enlace que, probablemente, contará con numerosos rostros conocidos y del que ya ha empezado la cuenta atrás. ¿Irá la reina Letizia? "No lo sé, puede ser. Mira, creo que toda persona que quiera a Víctor y a Ana son bienvenidas", ha confesado a los micrófonos de Europa Press.
Sin embargo, a pesar de quedar poco más de un mes y medio, Natalia ha confesado que no tiene "ni vestido ni regalo" para el evento. Y es que, no ha parado a nivel profesional en estos últimos meses. "No me da la vida para más", ha dicho con una sonrisa.
Dejando claro que tiene bien interiorizado el dresscode, ha confesado que, hasta la fecha, no tiene el look ni mirado. Lo que tampoco tiene claro es cuál será su regalo pues, como ella misma ha explicado, no sabe qué regalarle a alguien que es como su hermano: "No sé, yo lo pienso con mi hermana o mi otro hermano y diría… No sé. ¿Qué te regalo, te ayudo en la boda con algo?".
Lo que sí tiene claro es que van a ser un gran matrimonio, como la bonita pareja que han demostrado ser estos años: "No hace falta pasar por el altar para tener un compromiso con alguien y quererse. Y creo que están en un gran momento".
Desde que los caminos de Natalia y Víctor se cruzaran en el set de rodaje, han ido forjando una amistad que a día de hoy es más que familiar. "Es ver poquito a poco, año a año cómo seguimos ahí, cada uno con nuestras circunstancias. Cómo nos va cambiando la vida y lo vamos viviendo juntos. Como un hermano, es lo mismo", ha dicho con una sonrisa y orgullosa de conservar una de las amistades más importantes de su vida.