EN PUNTA CANA
Soplando las velas para comenzar una nueva etapa, maría Pombo ha sorprendido rescatando de su vestidor un diseño muy especial: su segundo vestido nupcial. Una fiesta que ha organizado en Punta Cana y que ha sido muy comentada en redes.
En Punta Cana y rodeada de su gente (aunque no de todos), María Pombo se ha despedido de la etapa de los 20 por todo lo alto. Primero con una fiesta funeral y después con una celebración ibicenca con un gran protagonista: su vestido nupcial.
Y es que, para soplar las velas por los 30 años, la influencer ha organizado una cena en la que todos han tenido que sacar sus mejores joyas de color blanco del vestidor. Y, como buena anfitriona, María ha rescatado el segundo vestido que lució en su boda, concretamente en la fiesta de después del banquete.
Lo ha celebrado con una cena en la que no han faltado las patatas fritas, una enorme tarta llena de velas, un baño de madrugada y rumores de que se podría haber vuelto a casar con Pablo.
Fue el 22 de junio de 2019 cuando María Pombo y Pablo Castellano sellaron su amor ante el altar. Un enlace que fue retransmitido en directo y por las redes sociales y con el que la influencer dio un ejemplo de originalidad.
Su primer vestido nupcial fue un diseño que nunca antes habíamos visto entre los rostros conocidos de la red. Un vestido de cuello halter satinado, de corte sirena, con parte de la espalda al aire y que combinó con un batín color hueso con trasparencias y bordados.
El segundo, que ha rescatado ahora para su 30 cumpleaños, también fue muy aplaudido. Un diseño boho chic de encaje, con flecos en la falda y con corsé. Ambos de la firma Yolancris, en quien confió para uno de los días más especiales de su vida y que también le ha acompañado en esta nueva etapa. Y es que, la ocasión merecía recuperar esta joya del fondo de su vestidor.