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UN DURO VARAPALO PARA LA INFLUENCER
María Pombo acaba de recibir un duro varapalo: el fallecimiento de su abuelo materno, Luis Ribó. La influencer, que ya ha comenzado la cuenta atrás para conocer a su pequeño Martín, que tiene previsto nacer a principios de este próximo mes de enero, ha tenido que enfrentarse a la triste pérdida de su abuelo. Dado a su avanzado estado de gestación y debido al hecho de que su parto podría verse adelantado, tal y como ella misma comentaba recientemente en redes, la empresaria no ha podido acudir al Tanatorio de San Isidro de Madrid.
Sin embargo, la joven sí ha querido despedirse de él. Y es que, junto al resto de la familia, se ha desplazado al Cementerio de la Almudena, donde ha tenido lugar la incineración. Ataviada con ropa cómoda oscura, un rostro visiblemente afligido y con una rosa blanca en su mano derecha, María le ha dado el último adiós a su abuelo.
Un golpe de lo más complicado al que ahora se ha tenido que enfrentar a poco tiempo de la llegada tanto de la Navidad como de su futuro hijo. A su lado en todo momento y sin separarse de ella ni un solo segundo, su marido, Pablo Castellano se ha mostrado a su lado incondicionalmente para ayudarle a pasar el durísimo duelo.
Además, la pequeña de las Pombo, a pesar de su notable tristeza, ha querido mostrarse al lado de su madre, Teresa Ribó, que ha despedido para siempre a su progenitor, a quien le agarraba afectuosamente del brazo.
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Así ha quedado la preciosa habitación del hijo que esperan María Pombo y Pablo Castellano