SUS PALABRAS
Cinco meses después de haber sufrido un accidente de coche, Joaquín Torres ha tenido que volver a pasar por quirófano para operarse de la cadera. Un complicado estado de salud que se ha sumado a la tristeza que protagoniza su vida después de haber perdido a su madre hace tan solo un mes.
El pasado diciembre, Joaquín Torres hacía saltar todas las alarmas al comunicar en sus redes sociales que había sufrido un accidente de moto por el que se encontraba ingresado en el hospital. El resultado de este trágico revés fue la rotura de la pelvis, una fractura en el antebrazo y una lesión de hígado y de pulmón. Poco a poco, el arquitecto ha ido compartiendo con sus seguidores su recuperación, siendo esta la cuarta vez que ha tenido que entrar en quirófano.
Hace unas horas, Joaquín revelaba que estaba a punto de someterse a una nueva operación, esta vez de la cadera, debido al accidente que sufrió hace ya cinco meses: "Mi querido doctor Ángel Villamor me va a colocar una prótesis de cadera, pues la mía, debido a la necrosis, es inservible".
Desde la cama del hospital, con buen aspecto y siempre optimista, el arquitecto ha grabado un vídeo para dar las gracias a todo aquel que ha dedicado unos minutos de su tiempo en mandarle mensajes de cariño: "Después de cuatro meses, los meses más duros de mi vida, empiezo a ver la luz". Él mismo ha contado que se ha sometido a cuatro operaciones en todo este tiempo y que parece que, actualmente, la prótesis que lleva funciona, demostrando que puede ponerse de pie sin dificultad aunque todavía los sanitarios le han aconsejado no andar. "De verdad, estoy fenomenal. No me duele, en dos días esto ha mejorado muchísimo", ha sentenciado. Poco a poco, su vida volverá a la normalidad.
Y es que, no han sido meses fáciles para Joaquín pues, más allá de este accidente y sus respectivas operaciones, el arquitecto también ha tenido que hacer frente a la pérdida de uno de sus pilares fundamentales: su madre. Fue a principios de marzo cuando comunicó la noticia, compartiendo una emotiva carta de despedida hacia la mujer de su vida: "Me ha dejado tanto amor y un ejemplo de vida, que siempre será un legado que nada ni nadie podrá superar".