FAMILIA UNIDA
El matrimonio ha acudido al debut de su segundo hijo como jugador de balonmano del Barça
Es la primera vez que se ve a la infanta Cristina e Iñaqui Urdangarin juntos en un lugar público desde que el empresario obtuvo el tercer grado y salió de prisión tras cumplir condena por el caso Nóos. Y reaparecen para apoyar a su hijo Pablo en un día muy especial: su debut como jugador del Barça de balonmano, el mismo equipo en el que Urdangarin se convirtió en una leyenda.
Mientras el sobrino del Rey Felipe VI jugaba, sus padres no le quitaban el ojo de encima, muy emocionados por ver a su hijo en la cancha, que marcó tres goles de los 39 que le dieron la victoria a su equipo.
Sin duda se trató de un momento importante para toda la familia, y que iba mucho más allá del orgullo paterno: Iñaqui Urdangarin también formó parte del mismo equipo de balonmano durante nada más y nada menos que 14 temporadas, entre los años 1986 y 2000. Ver jugar a su hijo sin duda le habrá traído muchos recuerdos.
Tanto la infanta cristina como su marido se mantuvieron relajados y tranquilos durante todo el partido, lejos del foco mediático, aunque sí es cierto que Urdangarin mantuvo alguna que otra charla con otros asistentes al partido.
Fin de semana de compromisos
Mientras que la infanta Cristina asistía al partido de balonmano de su hijo Pablo, su hermana la infanta Elena se encontraba celebrando el enlace de Philippo de Grecia y Nina Flohr, que tuvo lugar en Atenas y donde se reunió gran parte de las familias reales europeas.
Como era de esperar, la Familia Real española necesariamente debía tener representación, ya que el príncipe de Grecia es primo directo de las infantas y el Rey Felipe VI, quien no pudo acudir a la boda porque ese mismo día estaban teniendo lugar los premios Princesa de Asturias.
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