SE LLAMA PATRICIO
¡Ya son cuatro en casa de María Fernández-Rubíes! Y es que, este pasado 31 de enero la influencer daba a luz a su segundo hijo, Patricio. Una emocionante llegada que en cierto modo se vio ensombrecida en redes sociales por los dolorosos comentarios que recibió a raíz de anunciar el nombre que habían elegido para el recién nacido.
Este pasado 31 de enero a las "01:56h", María Fernández-Rubíesdaba a luz a su segundo hijo con el odontólogo Manu Losada. Una feliz noticia de la que la influencer nos hizo testigos con una tierna galería de imágenes y junto a un entrañable pie de foto donde, al fin, revelaba el nombre que habían elegido para su bebé puesto que lo mantuvo en secreto a lo largo de su embarazo.
"Qué GANAS teníamos de conocerte,Patricio. O Patito, como ya te llama tu hermano Nicolás", escribía la joven, anunciando así que Patricio, un nombre que no les había sido fácil elegir como confesó en una reciente entrevista a la revista ¡HOLA!, ya había llegado al mundo.
Sin embargo, lejos de la emoción y dulzura que en sí desprendía la publicación, lo cierto es que el nombre escogido para el recién nacido ocupó gran parte de la atención en el tablón de comentarios...
Y no especialmente para bien puesto que, por desgracia, la creadora de contenido recibió una serie de hirientes mensajes donde muchos cuestionaron la elección del nombre de su bebé: "Es broma lo de Patricio, ¿no?", "El registro hasta las 8.30 no abre, aún estáis a tiempo", "Lo de los nombrecitos que estáis eligiendo en vuestro entorno, se os está empezando a ir de las manos", "Madre mía Patricio, ¿no había nombres mejores?" o "Si ya nos lo presentas con la corrección que hace Nico diciendo que le llama 'Patito' y todos los amigos influencers le llaman 'Pato' en lugar de 'Patricio', igual hay que plantearse algo... ¿no?", son algunas de las dolorosas frases inmortalizadas.
Sin embargo, así como muchos criticaron la decisión de llamar a su bebé Patricio, muchos otros salieron en su defensa y tacharon de "vergonzoso" el polémico debate que se había generado por su elección: "En vez de felicitar a unos padres que acaban de tener un hijo precioso, la gente se dedica a opinar si les gusta o no el nombre, ¿os han pedido opinión?", "Libertad de expresión no es sinónimo de 'digo lo que pienso sin importar si hago daño'... No os tiene que gustar el nombre, ni de lo pongáis a vuestros hijos, pero si vais a comentar 'vuestra opinión' (que a nadie le importa, por cierto), por lo menos que no sea para hacer daño" o "QUÉ TRISTEZA ME DA, me da pena leer tantos comentarios destructivos".