¿ES PUBLICIDAD?
Dulceida y Alba Paul han compartido con sus seguidores la feliz noticia del nacimiento de su hija, Aria, pero se les ha girado en contra por una foto en la que Aida aparece con un fuet. Algunas personas critican el hecho que pueda ser publicidad.
Esta semana se ha dado a conocer una de las noticias más esperadas en el mundo influencer: se trata del nacimiento de Aria, la hija de Aida Domenech (Dulceida) y Alba Paul. La feliz pareja ha anunciado en redes que la pequeña había nacido el martes, 15 de octubre, a las 18.20 h, en una clínica de Barcelona. "El amor de nuestras vidas ya está aquí, ni en nuestros mejores sueños, estamos alucinando y explotando de amor", decía el bonito mensaje.
Entre las felicitaciones están las de amigos y amigas como Chenoa, Paula Gonu, Chiara Ferragni, Laura Escanes, Xuso Jones y Miguel Ángel Silvestre.
El post iba acompañado de un carrusel de fotos de Dulceida y Alba con el bebé, pero de entre las cinco imágenes publicadas, hay una que ha llamado la atención y que ha sido el centro de las críticas. En ella, aparece Dulceida con Aria en un brazo y en el otro, sujetando un fuet. Y este es precisamente el motivo de la polémica: el fuet.
Muchos de los usuarios han criticado el hecho de que pueda hacer publicidad justo después de parir y han dejado comentarios como "Facturando desde el día 1", "Lo del fuet, surrealista", "No te creo", "Aprovecha para hacer promo del fuet".
Pero lo cierto es que no este post no es publicidad. Así lo ha afirmado Aida en un Stories de Instagram. La influencer, visiblemente enfadada, piensa que es "indignante que una mujer que acaba de ser madre, tenga que salir a desmentir cosas que son muy evidentes" e insiste en que las críticas no tienen razón de ser. El motivo de llevar el fuet en la mano es que "llevo 9 meses deseando comerme un fuet y eso es lo que he hecho y seguiré haciendo". Continúa diciendo que seguirá publicando "lo que me apetezca, con etiqueta o sin etiqueta porque puedo comer la marca que me da la gana, que para eso es mi vida".
En el texto, recuerda que la ley obliga a marcar lo que es publicidad y, en este caso, no hay ningún indicativo. Efectivamente, existe la Ley General de Comunicación Audiovisual y un Real Decreto, aprobado el 30 de abril, que fija una serie de obligaciones que los "usuarios de especial relevancia", los influencers, deben cumplir. Entre estas, está la de identificar los contenidos publicitarios.
Dulceida termina con un mensaje muy directo y muy claro hacia los haters: "Así que, siendo igual de maleducada que vosotros, a estas personas os mando a la mierda y sigo feliz con mi vida".
A todo esto, sus seguidores han salido en tromba a defenderla. Como aquellos que se preguntan "por qué se le acribilla" cuando "hay miles de personas que cuando suben la foto de su bebé en el hospital y salen comiendo sushi, jamón… no pasa nada". Otras usuarias defienden que es "una persona normal" que "puede comer el embutido que más le gusta" y que les "dejen disfrutar de su maternidad".