MUY MOLESTO CON LOS COMENTARIOS
Íñigo Onieva no piensa dejar que los rumores de infidelidad a Tamara Falcó acaben con su relación. El empresario, muy molesto con lo que se está diciendo sobre él, ha decidido tomar medidas.
Tamara Falcó y su novio, Íñigo Onieva, parecían vivir en un cuento de hadas hasta que los rumores de infidelidad por parte de él salieron a la luz. Ahora se han convertido en el centro de los titulares de la prensa del corazón, que ya había tildado al empresario de ser un mujeriego.
Fue la televisiva Fani Carbajo la que destapó la supuesta infidelidad después de afirmar que Íñigo habría sido pillado besándose con una joven venezolana en una casa del centro de Madrid donde se estaba celebrando una fiesta ilegal.
Unos rumores que la Marquesa de Griñón quiso frenar al publicar en su Instagram una foto de los dos durante una boda de unos amigos. Pero lo cierto es que de poco sirvió, ya que ambos han sido perseguidos por los reporteros que intentan conseguir que alguno de ellos responda a las preguntas.
Pero ambos se han mostrado bastante molestos ante la persecución mediática. De hecho, Íñigo, en su línea, ni se molestaba en responder. Mientras tanto a Tamara se le veía muy enfadada e increpaba a los reporteros a la salida de su casa indicándoles que se trataba de una propiedad privada.
Sea como sea, lo cierto es que parece ser que Onieva estaría dispuesto a dar un paso más contra aquellos que aseguran que le ha sido infiel a Tamara, y no se pensaría dos veces el llevarlos a los Tribunales por difamación.
Un paso con el que Íñigo demostraría además a su novia que nada de lo que se está diciendo es verdad, aunque ella está dejando claro que confía plenamente en su chico pese a lo que muchos digan.
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