ANTES DE JURAR BANDERA
Este sábado 7 de octubre, Doña Leonor jurará bandera en la Academia General Militar de Zaragoza, los que significará que pasará a estudiar con los cadetes de segundo curso. Pero, ¿cómo ha sido su vida en su primer mes de formación militar?
Este mes de octubre promete ser muy emocionante para la princesa Leonor. Para empezar, mañana, sábado 7 de octubre, jurará bandera en la Academia General Militar de Zaragoza, igual que lo hizo su padre, el Rey Felipe, el 11 de octubre de 1985. Luego, el jueves 12, asistirá a la celebración del Día de la Hispanidad y lo hará en las filas de las fuerzas de seguridad. El viernes 20, presidirá la ceremonia de entrega de los Premios Princesa de Asturias. Y por último, el 31 de octubre, cumplirá 18 años y deberá jurar la Constitución ante las Cortes Generales.
Todos estos acontecimientos son simplemente pequeños pasos que, como heredera, la acercan cada vez más al trono español. Sin embargo, para algún día poder reinar, debe completar su formación militar, ya que el Jefe de Estado también está al mando de las Fuerzas Armadas. Para lograrlo, necesita dedicar tres años a sumergirse en una formación militar sólida.
¿Cómo han sido estas primeras semanas como dama cadete? Te explicamos lo más destacado.
Doña Leonor ingresó en la Academia General Militar de Zaragoza el jueves 17 de agosto de 2023, igual que otros 611 jóvenes que aspiran a ser oficiales del Ejército de Tierra. La Heredera aseguró estar "muy ilusionada, con ganas y nervios" de convertirse en cadete junto al resto de compañeros. En la Academia, Leonor fue recibida como una alumna más, por lo que le asignaron cama en una habitación compartida con más damas cadete.
Durante los primeros días, los nuevos integrantes de la escuela militar participaron en el módulo de adaptación en el que aprenden acciones básicas como formas, saludar a los superiores, desfilar y a manejar fusiles de asalto. Las damas cadete, además, tuvieron la tarea añadida de aprender a peinarse como manda el reglamento del centro, que es con coleta y moño fijados con horquillas, redecillas y gomas.
Una vez completada esta etapa, la princesa Leonor fue designada oficialmente como dama cadete y, junto con sus compañeros, recibió un distintivo conocido como boina de combatiente rojo grancé. Poco después, participó en la ceremonia de entrega de sables, donde interactuó con los veteranos.
Según pudo saber el periódico El País, Leonor se ha adaptado muy bien a su vida en la Academia, puesto que es totalmente autónoma a la hora de cuidar de ella misma y no le molesta en absoluto dormir rodeada de sus compañeras en una habitación sencilla con varias camas. Lo mejor es que ya ha hecho un pequeño grupo de amigas con quien a veces sale a tomar algo a la zona universitaria de Zaragoza.
En cuanto a los estudios, el mismo rotativo asegura que la parte física es la que más le está costando a la futura reina, pero que, en cambio, se le da muy bien la cartografía, es decir, tiene buena mano para trazar mapas geográficos. Por otro lado, al ser bilingüe con el inglés, ahora ha comenzado a aprender francés.
El País también destaca que, aunque la prioridad de la Academia es que la Princesa de Asturias viva la experiencia militar como una alumna normal y corriente, lo cierto es que tiene un programa teórico específico que unifica dos cursos en uno; este mes de septiembre ha estado cursando asignaturas de primero, mientras que, a partir de la semana que viene, una vez haya jurado bandera, pasará a estudiar con los cadetes de segundo curso y a recibir lecciones de idioma militar sobre armas y maniobras.
Está previsto que en julio Leonor termine su primer año de formación y que, por lo tanto, siguiendo los pasos de su padre, ingrese a continuación en la Escuela Naval Militar de Marín y, por último, en el Ejército del Aire y del Espacio.